Un waveglider, robot de dos cuerpos para la navegación submarina y sobre superficie, viaja desde ayer en dirección a la isla de El Hierro para estudiar el área de la erupción volcánica submarina en La Restinga, donde chequeará el efecto del fenómeno geológico en el ecosistema marino.

Personal técnico y científico de la Plataforma Oceánica de Canarias (Plocan) realizó ayer el lanzamiento desde un buque que partió del puerto de Taliarte, en una misión que se espera que el robot complete en tres semanas.

El waveglider salió a primeras horas de la tarde de ayer para cubrir una travesía de aproximadamente 250 kilómetros. "Calculamos una semana hasta llegar a El Hierro. Otra en la que el vehículo tomará datos en aguas de La Restinga, y una tercera para hacer el recorrido de vuelta a Gran Canaria", explicó Miquel Moll, director de Ems-sistemas, la empresa en España que representa a la del fabricante Liquid Robotics.

A diferencia de los gliders convencionales, el artefacto posee un cuerpo sobre superficie que permite la emisión de datos de forma ininterrumpida, veinticuatro horas al día y en tiempo real, por lo que no hay que esperar a que salga a superficie para que los investigadores hagan el vaciado de información.

También el sistema de propulsión es diferente, según explicó Moll. "Puede ir a diferentes velocidades, pero como máximo a unos 2 nudos (2 ó 3 kilómetros por hora). Es puramente mecánico, no hay ninguna energía eléctrica, lo que permite a este sistema ahorrar muchas baterías".

Con aproximadamente unos ciento cincuenta kilos de peso total, la zona de superficie dispone de placas solares que son las que alimentan el GPS y las comunicaciones. Y pese a su apariencia de fragilidad, avanza a mayor rapidez cuanto más oleaje se produce en el medio.

La campaña iniciada ayer responde a varios desafíos técnicos y científicos, tanto para el ámbito de la investigación local como internacional, según explicó Miquel Moll.

El personal de Plocan probará el vehículo para verificar su interés en el empleo de misiones futuras y el fabricante pondrá una vez más a prueba el waveglider para demostrar que puede realizar travesías de larga distancia, cualidad que ya han acreditado misiones en el área de la costa de Estados Unidos y la zona del Pacífico.

Al mismo tiempo, la comunidad científica, sobre todo de las universidades canarias y otras instituciones, podrá recibir información acerca de cuál es la situación del entorno del volcán submarino varios meses después de que la actividad bajo el mar en La Restinga haya descendido a mínimos.

También eventuales campañas utilizando este vehículo podrían confirmarse en otras partes del planeta, según explicó Moll. "Se está considerando usarlo en Fukushima por las autoridades japonesas y la Comisión Atómica Internacional".

Además, la misión de este vehículo, que a diferencia de los gliders o planeadores submarinos tiene cuerpo en la superficie en forma de tabla de surf y no se desplaza mediante energía eléctrica, podrá ser seguida de manera virtual en Internet por investigadores de cualquier parte del mundo.

Seguimiento

Desde el instante mismo del lanzamiento, personal de la Plocan realiza el control del vehículo en su travesía. "Durante su viaje y en tiempo real, haremos cada hora acopio de los datos del waveglider, explicó Carlos Barrera, responsable de vehículos de la Plataforma Oceánica.

"El seguimiento va a realizarse desde Canarias desde el punto de vista técnico. Plocan quiere aprender la utilización de este glider, y la posibilidad de usarlo en el futuro", añadió Álvaro Lorenzo, encargado en el mismo departamento.

En cuanto al seguimiento científico, "casi con toda seguridad va a haber investigadores de la Universidad grancanaria y también del Instituto Canario de Ciencias Marinas".

A todos ellos les interesarán los datos inéditos que durante una semana proporcione el vehículo: de tipo meteorológico, como temperatura, presión atmosférica o humedad relativa. Y medición de corrientes submarinas, mediante sistema acústico, datos de salinidad y otros parámetros bioquímicos.