La radioterapia de altas dosis es eficaz para combatir los cánceres de mama localmente avanzados que carecen de otras alternativas como tratamientos o intervenciones quirúrgicas. Este es el resultado de la investigación de dos décadas liderada por Pedro Lara, jefe del servicio de Radioterapia Oncológica del Hospital Doctor Negrín.

Esta radioterapia radical eliminó completamente los tumores locales de un 82,5% de las pacientes tratadas que no habían respondido a la quimioterapia ni a la terapia hormonal. Unas conclusiones que se presentaron ayer en el 31º Congreso de la Sociedad Europea de Radioterapia y Oncología de Barcelona.

Además, las pacientes que sí respondieron a la quimioterapia también se benefician de esta nueva técnica que permite reducir el número de extirpaciones de pecho.

"Con altas dosis de radiación dos veces al día se da la oportunidad a las pacientes que no tienen alternativa. No se usaba en estos pacientes porque se pensaba que era paliativo, pero nosotros pensamos en dirigirlo a un tratamiento para controlar la enfermedad", explicó Lara en conversación telefónica desde Barcelona. En total, en estos 20 años se ha tratado a 184 pacientes con una enfermedad muy avanzada, que no se podían operar y que no habían respondido a la quimioterapia. "Afortunadamente cada vez hay menos pacientes en esta situación porque se diagnostica antes la enfermedad. La idea es que si podemos tratar a los pacientes en situación desfavorable y conservar la mama, se podría aplicar en situaciones menos avanzadas", añadió.

Lara aclaró que una de cada cuatro pacientes sometida al tratamiento ha tenido problemas severos de las mamas por toxicidad, pero han conservado su mama. "En otros sitios usaban dosis de radioterapia pero con la intención de paliar, no de curar", sostuvo.

El médico destacó que tres de cada diez de estas mujeres siguen vivas a los 20 años, que "es muchísimo en una situación que originalmente era muy desfavorable".

Las enfermas con estadio muy avanzado pertenecen a dos grupos muy definidos: mujeres jóvenes con tumor inflamatorio que aparece con rapidez y agresividad, y por otro lado, mujeres que han visto cómo crecía el tumor pero no habían acudido a la consulta.