La Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) empezará el próximo curso sin haber diseñado y aprobado un plan académico y por tanto sin saber con qué número concreto de profesores va a contar, ni con cómo se van a distribuir sus funciones y horarios. La causa de esta situación no es otra que el punto muerto en el que ha quedado el decreto de recortes aprobado por el ministerio de Educación y sobre el que ayer el ministro, José Ignacio Wert, aceptó crear una comisión para modificar una de sus medidas, precisamente la modificación del régimen de dedicación de los profesores. "Todas las universidades estamos en un momento de incertidumbre terrible, no sabemos hacia dónde ir, por dónde ir y no vemos nada claro los objetivos del decreto ni que lo que dice perseguir se logre con las medidas que incluye", dijo Regidor.

"Seguimos con la misma incertidumbre sobre cómo abordar la aplicación del decreto de forma inmediata de cara a la planificación del próximo curso. No sabemos si vamos a aplicar o no las condiciones que ahora mismo hay en el decreto, sobre todo en relación con las medidas que afectan al profesorado, y lo que nos pide el decreto para disminuir el número de profesores", se lamentó Regidor.

"Los tiempos se nos agotan y no puedo empezar a matricular a los estudiantes, y lo tendré que hacer en un plazo muy breve, sin saber en estos momentos con qué profesorado cuento ni su dedicación".

En relación con la subida de tasas, la reunión no aportó novedades y el ministro no ha dado marcha atrás en el sistema de incremento de entre el 15 y 25 por ciento del coste real de una carrera. Wert mantuvo que serán las comunidades las que decidan con sus respectivas universidades el porcentaje de incremento a aplicar dentro de esa horquilla. Regidor recordó que el Gobierno de Canarias ya ha anunciado que aplicará un incremento de tasas de la parte baja de la horquilla aunque no concretó el porcentaje. "El consejero ha dicho que aplicará la parte baja de la horquilla", agregó.