Desde 1º de la ESO -curso en que las notas empiezan a ser numéricas- Judith Nuez Déniz ha sacado un 10 en todas las asignaturas, por eso a nadie le extraña que haya sido la alumna con mayor nota de la PAU con un 13,77. La joven, alumna del IES Isabel de España, cuenta que lo importante es la organización, algo que le da buen resultado porque sacó de media en Bachiller un 10 y repitió éxito en los exámenes generales de la PAU: Lengua (10), Filosofía (10), Inglés (10) y Química (10).

Hasta hace un año Judith, que eligió Bachillerato Científico, quería estudiar Arquitectura, pero poco a poco se empezó a interesar por la Ingeniería Aeronáutica. "Me gusta porque es muy completa. Tiene diseño, economía, idiomas... Y la posibilidad de estudiar fuera. Además, me gusta proyectar, quiero diseñar aeronaves, me parece fascinante", explica la estudiante, que está a la espera de las listas definitivas, pero que en principio no tendrá problemas para entrar en la Universidad Politécnica de Madrid, que tiene una nota de corte para Ingeniería Aeronáutica de 11,184.

Judith no sacó la nota máxima de la PAU (14) porque en los exámenes voluntarios, dirigidos a subir la nota, bajó un poco la media: Dibujo Técnico (10), Física (8,3) y Matemáticas (8,8), de los cuales se toman los dos en los que más nota se saca. La alumna, de 18 años, reconoce que lo que más le cuesta estudiar son las asignaturas de Letras, como Lengua o Filosofía, por lo que son a las que más horas les dedica. "El resto, como Física o Dibujo Técnico, con estudiar dos días antes es suficiente para mí. Lo importante es llevarlo todo al día", recomienda.

Cuando le llamaron para decirle que era la alumna de mayor nota de los que se presentaron en la ULPGC, no se lo creía. "No me esperaba sacar tan buena nota. Soy muy insegura. No salí satisfecha de alguno de los exámenes de la PAU. Creo que lo de sacar tan buenas notas es porque mis padres siempre han sido muy exigentes conmigo y me decían que con esfuerzo todo se consigue", comenta la joven del barrio de Lomo Apolinario de la capital grancanaria.

Orgullo

La alegría no es solo para Judith, sino para su familia y los profesores del IES Isabel de España, donde empezó a estudiar cuando dejó el CEIP Alcalde Ramírez Bethencourt. También para las amigas con las que quedaba cada día en la biblioteca para preparar la PAU, entre nervios y apuntes. "Mis amigas han sacado también notas espectaculares. La alegría es compartida. Y es un orgullo para el instituto, que ha sacado muy buenas notas en la PAU con un cien por cien de aprobados", dice con una sonrisa. Pero la canaria no sólo estudia, también desde que era pequeña ha realizado numerosas actividades extraescolares, como guitarra, piano, pintura o canto. Nunca ha tenido una tarde libre y aún así sacaba tiempo para llevar todas las asignaturas al día.

Ahora todo eso ha cambiado y su tiempo lo dedica a disfrutar de las vacaciones y a planear su nueva vida en Madrid, a donde irá gracias a una beca de excelencia y otra de la administración pública. Sus padres no tuvieron la oportunidad de estudiar una carrera y ella no quiere desaprovecharla. Sabe que es una ingeniería complicada, pero no la asustan los cuatro años que la esperan.

Además, aclara que no es cierto que saque buenas notas porque le guste estudiar. "A mí no me gusta estudiar, yo prefiero estar en la playa. No es cierto que quienes sacamos buenas notas estemos todo el día encerrados. Yo salgo con mis amigos y de marcha, pero también busco tiempo para los estudios".