Tomarse una copa escuchando música en directo empieza a ser algo habitual en las tardes y noches capitalinas. Más de una treintena de locales de la ciudad ofrecen su carta de siempre aderezada con un espectáculo en vivo. Los pequeños empresarios en plena crisis apuestan por nuevos maridajes entre gastronomía y música, una alternativa que cada vez gusta más y atrae a los potenciales consumidores. No en vano, los más veteranos aseguran que actualmente hay el doble de locales con música en directo que en los años 90.

Propietarios, músicos y productores celebran este auge, que se debe en gran medida a la promoción de la Ruta Playa Viva, que aúna a los diferentes establecimientos de la zona de Las Canteras. Pero los profesionales recuerdan que no todos los locales ofrecen la misma calidad de sonido o tienen el espacio suficiente para poder albergar a los grupos.

"Locales hay muchos, pero que reúnan las condiciones necesarias pocos, como pueden ser el Mojo o el Nasdaq", comenta Javier Brichis (JBrich) que aporta su visión como músico. "La cosa cada vez está peor. Si antes pagaban poco, ahora menos. Aquí en Canarias el músico está muy mal tratado", opina el artista, cuyos temas sonarán en la próxima serie de Telecinco, Frágiles.

Lorenzo de la Hoz es uno de los propietarios del Mojo, ubicado en la plaza de la Música junto a otros locales que también han apostado por los decibelios en directo. "Cuando abrimos hace unos cuatro años había muy pocos locales con música en directo. Sin duda, la Ruta Playa Viva ha motivado la promoción de los conciertos en locales y terrazas. En el Mojo intentamos apoyar y dinamizar el ocio nocturno", comenta De la Hoz que intenta traer de vez en cuando algún grupo de fuera de las Islas.

El problema está en que a los clientes les gusta disfrutar de los grupos, pero no tanto pagar por verlos. "Cuesta bastante que paguen porque la gente se acostumbra a que todo sea gratis. Ni siquiera conseguimos que adquieran las entradas simbólicas, que valen unos cinco euros", añade De la Hoz que explica que es como un pescadilla que se muerde la cola: si no se cobra por entrar, es complicado traer a la capital grupos nacionales e internacionales.

Pese a ello, no hay duda de que la Ruta Playa Viva ha hecho mucho por la música en directo en la capital. En esta parte de la capital es donde más locales de música en vivo se agrupan, aunque su éxito se ha ido extendiendo a otros rincones de Las Palmas de Gran Canaria, como es el caso de Vegueta.

"Cada vez hay más locales, más ambiente", dice Nicolás Ortega, presidente de la Asociación de Empresarios Puerto - Canteras que pretende trasladar la moda de las tapas del casco antiguo a finales de este mes. "Es muy positiva la promoción de la música en directo. Hay un ambiente agradable, pero no sólo los fines de semana, también a diario. Este ambiente conjuga con la gastronomía y la buena situación al lado de la playa", añade.

Mientras que el Puerto se lleva las tapas, Vegueta cada vez se anima más al espectáculo en directo, pero con características propias como apunta el gerente de la asociación de este barrio, Yiyo Espino. "Nosotros no atraemos al público con la música, sino que es una oferta añadida a la gastronomía. La idea es que nuestros clientes se sientan más cómodos", aporta Espino.

En Triana y Vegueta varios locales apuestan por los conciertos, como El Envidia, Te lo dije Pérez o el Cuasquías. Otros como Dimas ofertan espectáculo de drag queen para amenizar la velada. "Buscamos alternativas diferentes a lo que hay en la ciudad", señala su propietario, Dimas Pérez.