El consejo escolar del IES de Las Palmas de Gran Canaria, centro resultado de la fusión este curso del IES Tomás Morales y el IES Santa Teresa de Jesús, tendrá que decidir en los próximos meses sobre la nueva denominación del instituto de la que podría desaparecer definitivamente el apelativo del poeta modernista español, natural de la villa de Moya. El centro se fundó en 1969 y poco después se bautizó con el nombre del autor de Las rosas de Hércules.

La cuestión para preservar el del escritor ha empezado a generar ciertos movimientos de apoyo entre profesorado, investigadores y conservadores, que reconocen en una eventual desaparición de Tomás Morales del nombre del centro fusionado una pérdida para la identidad literaria y sociocultural grancanarias.

La Consejería de Educación del Gobierno canario comunicó a los dos institutos en febrero de este año que uno de ellos iba a desaparecer al curso siguiente.

Y a finales de junio hizo pública su determinación de la fusión al publicar el Decreto 59/2012, de 20 de junio que confirmó la unión de ambos en el IES de Las Palmas de Gran Canaria.

El decreto anunció, al mismo tiempo, la supresión automática del Tomás Morales y el Santa Teresa de Jesús desapareciendo legalmente, por tanto, sus respectivos códigos de centro y sus sedes.

Mientras, la vida académica del nuevo instituto, (conocido como IES en Las Palmas, incluso con página web (www.iesenlaspalmas.org) y ubicado en las instalaciones del hasta el pasado curso IES Tomás Morales (de ahí la defensa de que ha de persistir el nombre del poeta), trata de recomponerse tras una decisión de Educación que ambos centros consideraron en su momento indeseable e impuesta.

Elecciones

A los ajustes naturales de un nuevo claustro, formado por alrededor de setenta profesores, y del alumnado, que suma casi el millar de estudiantes, tras las primeras semanas del curso 2012-2013 ahora toca empezar a caminar con nuevos órganos de participación y representación.

En este sentido, la formación de la nueva asociación de padres y madres de alumnos está en ciernes y mañana, jueves, las dos antiguas Apas del Tomás Morales y el Santa Teresa de Jesús han convocado a los padres del alumnado a una asamblea para decidir, entre otras cuestiones, la constitución de la asociación homónima del nuevo instituto.

Más tardíamente, el próximo mes de noviembre, se celebrarán elecciones a los consejos escolares en los centros de Canarias.

En el caso del IES Las Palmas de Gran Canaria, se elegirá al que será el máximo órgano de representación de una comunidad educativa que aún tiene que acostumbrarse a la fusión de los dos institutos capitalinos.

Por lo pronto, el calendario electoral tiene marcada la fecha del 22 de noviembre para la votación de los representantes del profesorado en el nuevo centro, según fuentes del centro.

En esos días, previsiblemente, también harían lo propio los electores de los colectivos de alumnos y padres así como del personal de administración y servicios.

La proclamación de los resultados electorales y la propia constitución del consejo escolar del ahora denominado IES de Las Palmas de Gran Canaria puede posponer hasta el próximo mes de diciembre la decisión sobre cuál será el nombre definitivo del instituto, según coincidieron ayer en estimar distintas fuentes educativas.

El centro, con 30 grupos de alumnos y 955 puestos escolares reconocidos por la Consejería, empieza a asumir la realidad de la fusión de los dos antiguos institutos de la capital grancanaria. Pese al impacto negativo que la noticia de la fusión generó sobre todo en la comunidad educativa del IES Santa Teresa de Jesús el pasado curso, que produjo entre otras consecuencias el cuestionamiento de la calidad de la enseñanza en el Tomás Morales, la convivencia en este primer mes del curso 2012-2013 arroja un balance de normalidad, según fuentes del centro.

Por decisión administrativa, que tiene que ver con características de la plantilla como la antigüedad de los docentes, el equipo directivo está conformado en buena parte por profesorado procedente del antiguo IES Santa Teresa de Jesús, según las mismas fuentes. Sin embargo, esa circunstancia tampoco ha originado alteraciones en la gestión de la vida académica del nuevo centro que ha visto multiplicado prácticamente por dos su plantilla y sus estudiantes. En este sentido, también se destaca la normalidad en la convivencia entre el alumnado pese a que ellos, al igual que el profesorado, también tienen que adaptarse a unas nuevas instalaciones (en el caso de los estudiantes del Santa Teresa) y a compartirlas con muchos más estudiantes (en el caso de los que ya estaba matriculados en el Tomás Morales).