Los descendientes de Tomás Morales consideran "indignante" el trato que está recibiendo la figura del poeta desde la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias, después de que se anunciara que el instituto que lleva su nombre en la capital grancanaria podría quedar como IES Gran Canaria tras su fusión con el Santa Teresa de Jesús.

La Consejería de Educación se ha desentendido del tema y ha dejado que decida el Consejo Escolar. Pero ahora, tras surgir la plataforma de antiguos alumnos del Tomás Morales en defensa de que se mantenga su nombre original, se une la voz de la familia. "Estamos todos indignados", señala Leonor Morales Manrique de Lara, nieta del poeta y portavoz de la familia. "Y todo esto no es más que un asunto político", añade, "no hay derecho que una persona que se dio a conocer en toda España, e incluso en todo el mundo, ahora los canarios no lo valoremos, y que un instituto que ha sido histórico, se quede con el simple nombre de IES de Gran Canaria". Leonor Morales recuerda que, además, ya hay otros precedentes en este sentido. "En su momento retiraron el nombre de Plaza de Tomás Morales para llamarla Plaza de La Constitución que ahora todo el mundo conoce como la plaza del supositorio, y allí está el busto de mi abuelo que hizo Victorio Macho , medio escondido entre las plantas", señala.

Prestigio

La nieta del poeta añade que Pérez Galdós ha sido mucho más mimado por los canarios, pero a Tomás Morales "le dan patadas por todos lados". "No entiendo ese afán por borrar el nombre de una persona que tiene un prestigio a nivel nacional y, si me apuras un poco, a nivel mundial. Santa Teresa de Jesús ni nos va ni nos viene, pero Tomás Morales es alguien importante para un canario. El año pasado en el colegio Heidelberg todos los niños tuvieron que aprenderse un trozo de la poesía de mi abuelo", aclara.

"¿Cuánta gente ha estudiado en el instituto Tomás Morales?", se pregunta la nieta del poeta, y añade que "no vamos a conseguir nada, porque los político ya han decidido y no te van a escuchar". Leonor Morales añade que debido a ese poco respeto por poner su figura en su verdadera dimensión, "la mayoría de la gente desconoce su lugar de nacimiento, nadie sabe que fue médico de Agaete, y que allí conoció a mi abuela, y que cuando nació mi padre se vinieron a Las Palmas de Gran Canaria. Pocos saben que su familia era de labradores".