¿Le recomendaría el método Feldenkrais a algún sector profesional en particular?

Se lo recomendaría a quienes se dediquen a cualquier actividad humana, ya sea física o intelectual. Este método es el estudio del movimiento del cuerpo, y se utiliza en arte, psicología, medicina o deporte. Los beneficios son muchos. Uno no tiene que estar enfermo para aplicarlos ya que ayuda al individuo a moverse más fácilmente, a reconocer los patrones que tiene y a aprender otros más eficientes. Sirve, por ejemplo, para respirar, para caminar mejor, etc. Nosotros anoche proyectamos una película del doctor Feldenkrais con un niño con parálisis cerebral. Y hemos trabajado con niños que no pueden correr porque tienen las rodillas deformadas.

¿En qué consistirá la terapia?

Se trataría de reeducar nuestro cuerpo por el sistema nervioso, descubrir qué es lo que estás realizando y ser consciente de tu movimiento. Es un trabajo más con la autoconciencia que con el movimiento. Si tienes dolor en un hombro o la mano, te podría mostrar algunas maneras de cambiar el modo, de trabajar de otro modo.

¿Cómo descubrió el método del doctor Feldenkrais?

Con quince años tuve una caída muy violenta que me dejó problemas en mi cuello. Con 42 fui a un taller de Feldenkrais en Australia donde por primera vez no me trabajaron en esa parte del cuello, sino en el esqueleto. Me di cuenta que todo estaba en la columna. Me salvó la vida porque tenía muchos problemas y necesitaba morfina para luchar contra el dolor. Ahora estoy totalmente cambiada. Feldenkrais descubrió este método tras una lesión jugando al fútbol.

¿De qué manera se trabaja en este método?

De dos maneras. Una se llama movimiento a través de la autoconciencia, que son clases grupales con secuencias enfocadas en una función concreta como por ejemplo, diferenciar entre el hombro y la cadera para caminar, jugar, etc. El otro es individual y se llama integración funcional.

¿Cuáles son los hábitos más nocivos de cara al movimiento?

Caminar sin mover las costillas. Los españoles no tiene problemas en ese sentido, pero en los del norte son más internos y el movimiento es más rígido. También recomiendo que, antes de operarse de la cadera, la persona se tome unas sesiones de Feldenkrais para recuperarse más rápidamente. Está el caso de una mujer que realizó seis sesiones, y se mejoró tan rápido que el doctor no se lo podía creer.

¿También cura lo que son traumas o recuerdos negativos?

Desde luego. Cuando viene ese recuerdo, solemos encoger la musculatura y bajar la respiración, y con esos pequeños movimientos movemos la musculatura que estaba atascada. Sentimos lo que estamos pasando, aprendemos cuáles son las reacciones y en vez de reaccionar con tensión, lo hacemos con respirar bien. Y así empiezan a cambiar los patrones. El trauma no se va, pero nuestra reacción puede ser otra. Y poco a poco vamos aceptando como estamos ahora.

¿Cómo ve la medicina moderna este método?

Es diferente según los países. Está muy reconocida en Australia, y en Melbourne, nuestros estudiantes tienen clase de Feldenkrais dos veces a la semana desde hace doce años en arte dramática y música. También está muy extendido en América , Israel y Centroeuropa. Con este método estudiamos los movimientos de los bebés y hasta de los anfibios para aplicarlos en nuestras investigaciones.

¿Cómo se ha recibido en Es- paña?

Hay mucha gente joven fascinada. Las clases las damos dos meses al año durante cuatro años. Los dos meses están separados porque necesitamos mucho tiempo para integrar la información. Los profesionales de Canarias se están formando y estarán preparados seguramente dentro de dos años, pero vendrán profesionales de la Península a educar en las Islas.

"