Dubái es la ciudad del lujo por excelencia y una vez más lo han vuelto a demostrar. Su policía patrullará las zonas más turísticas del emirato en un Bugatti Veyron, un superdeportivo que cuesta unos 1,3 millones de euros.

La nueva adquisición se une a una flota de lujo que cuenta con un Ferrari FF, un Aston Martin One-77 y un Lamborghini Aventado.

El Bugatti Veyron es uno de los coches más caros del mundo, dispone de 1001 CV y puede llegar a alcanzar 400 kilómetros por hora. Permite además pasar de 0 a 100 kilómetros por hora en 2,5 segundos.