Unas cincuenta mujeres se sumaron ayer en Las Palmas de Gran Canaria a la iniciativa promovida por la activista madrileña Yolanda Domínguez, que plantea la necesidad de registrar la propiedad de los cuerpos de las féminas para protestar contra la reforma de la Ley del Aborto que impulsa el Gobierno.

Tras los actos celebrados el pasado 5 de febrero en distintos registros de Madrid, Barcelona, Sevilla, Bilbao, Navarra y Pamplona, y después del que tuvo lugar hace unas semanas en Tenerife, esta protesta se celebró ayer en el registro de la propiedad número uno de la capital grancanaria.

Allí se han congregado integrantes de diferentes asociaciones que conforman la red feminista de Gran Canaria y militantes del PSC-PSOE, como Teresa Morales y la consejera del Cabildo grancanario Isabel Guerra, quienes, de manera individual, han registrado el "derecho a la posesión y el libre uso de su propio cuerpo", una acción simbólica con la que han querido reivindicar su "libertar para decidir" a la hora de abortar.

Juana María Santana, perteneciente a uno de los colectivos feministas de Gran Canaria, ha considerado que "todo movimiento ciudadano tiene que hacerse, independientemente de que lo que luego se pueda conseguir sea mayor o menor".

Además de criticar que las reformas legales que están en marcha en España "niegan la participación ciudadana", Santana ha estimado que "la presión ciudadana" puede ser útil para combatir "la injusticia".

Santana ha opinado que la acción de ayer deja patente que "las mujeres tienen derecho sobre su cuerpo en exclusiva, y que lo saben, por lo que no van a permitir ninguna expropiación de alguna de sus funciones ni ninguna otra cosa que signifique una limitación como ciudadanas con todos los derechos". Sobre el futuro del anteproyecto de la Ley del Aborto, la integrante de la red feminista de Gran Canaria ha confiado en que "no se apruebe".

"Creo que en este país tiene que quedar algo de cordura. Mientras estamos pensando en estas cosas que nos ofrecen como posibilidades, nos están quitando la alfombra de debajo de los pies, nos están haciendo una reforma laboral salvaje, nos están quitando un montón de recursos y entreteniendo con cosas que nos afectan muy dentro para que nos rebotemos, nos revelemos y aceptemos todo lo que nos está pasando en otros planos", ha referido.

A juicio de Juana María Santana, "esto no se puede permitir porque nos aleja del entorno sociocultural de Europa, nos hace retrotraer a un espacio tiempo muy anterior al que estamos ahora". "Teníamos una ley acorde con los países que nos rodean, y sin ningún informe negativo", aseveró.

Por otro lado, ayer e PP se volvía a oponer, esta vez en la Comisión de Sanidad y Servicios Sociales del Congreso, a la retirada del anteproyecto de reforma de la ley del aborto que había pedido la Izquierda Plural (IP)en una proposición no de ley. La iniciativa, que recibió 23 votos en contra y 15 a favor, instaba además a mantener la actual normativa y a realizar una evaluación en salud de los distintos aspectos de la ley para mejorar "la accesibilidad, universalidad y carácter público de la prestación". El diputado de IP Gaspar Llamazares ha opinado que el anteproyecto sigue "un dogma religioso".