Los trabajadores del servicio de urgencias del Hospital Insular de Gran Canaria mantienen la huelga iniciada el pasado día 9 para exigir más recursos, después de que la reunión mantenida este viernes entre los sindicatos y la Consejería de Sanidad no haya permitido lograr un acuerdo.

El secretario de Organización de UGT de Canarias, Luis Brito, ha lamentado "la nula predisposición" de la Consejería de Sanidad, que ha argumentado que "no hay dinero para aumentar la plantilla ni para habilitar nuevas zonas para el servicio de urgencias, como el área que antiguamente se destinaba a ello".

Los trabajadores piden que se habiliten camas libres y áreas vacías del hospital cuando el servicio de urgencias se colapse, ha indicad Brito a Efe.

El representante ha destacado que ayer se logró un acuerdo en el Hospital Universitario de Canarias, en Tenerife, y sin embargo, la Consejería ha argumentado que no hay dinero para Gran Canaria, por lo que "tendremos que pensar que hay pacientes de primera y de segunda categoría".

La directora de recursos humanos del Servicio Canario de la Salud, Carmen Aguirre, ha asegurado a Efe que "no hay ningún doble rasero" y la propuesta de acuerdo que la Consejería de Sanidad ofrece para el Hospital Insular de Gran Canaria es "prácticamente el mismo que para Tenerife".

Aguirre ha destacado que la negociación se ha mantenido durante más de cinco horas y había numerosos puntos de acercamiento entre ambas partes, por lo que Consejería continuará intentando lograr aproximar posturas la semana que viene.

La Consejería ofrece ampliar el servicio de urgencias con el área de radiología, lo que supone 14 camas más, y habilitar el área antigua, con 28 camas nuevas, ha dicho Aguirre.

Asimismo, está dispuesta a que, cuando el numero de pacientes pendientes de ingreso sea más de 20, se refuerce la plantilla, que se aumentará aún más si son los pacientes en espera son 35.

La Consejería de Sanidad ha ofrecido también mejorar el circuito de altas con más refuerzo de personal, dotar con más ambulancias el horario nocturno, hacer un inventario sobre el material y poner a disposición de los trabajadores la evaluación de riesgos laborales actualmente en elaboración.

Igualmente, se establecería un grupo de trabajo para planificar los servicios de urgencia en toda Canarias y se revisarían las plantillas de todos los centros.

Aguirre ha destacado que la Consejería no puede asumir el nivel de incremento de plantillas que piden los sindicatos, pues el Gobierno de Canarias actual dejará de serlo tras las elecciones y no puede asumir compromisos que hipotequen al futuro.