Es una estampa más invernal que primaveral, pero esta temporada llega tras el eclipse y el inicio de la primavera. Ahí tiene, querido lector, a la derecha, la imagen nevada de la cumbre del Teide. La borrasca que ha afectado al Archipiélago durante las últimas 48 horas ha dejado nevadas en el Parque Nacional del Teide. Y también en La Palma en alturas de más de dos mil metros, como en el observado y observatorio del Roque de los Muchachos. Pero la clásica estampa es la de la cumbre tinerfeña, bien visible desde Las Canteras, si el tiempo no lo impide. La nieve llega con frío; elemental, querido Watson. Durante todo el día la temperatura en las instalaciones del teleférico del parque nacional vecino no ha superado los cero grados (ni frío ni calor, según la repetida broma). El caso es que debido a esas las condiciones de viento y precipitaciones, el teleférico del Teide permaneció cerrado y las cumbres blancas. También la cumbre de Gran Canaria soportó bajas temperaturas pero, como no tiene teleférico, por ahora, se libraron de cerrarlo.