El ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi está intentando vender la villa de Cerdeña en la que celebraba sus ya famosas fiestas bunga-bunga con decenas de jóvenes y ha iniciado la ronda de visitas de posibles compradores con un príncipe saudí. Berlusconi puso en venta Vila Certosa en 2007, poco después de que sus bacanales saltaran a la primera plana de la prensa italiana y precipitaran su salida del Gobierno poniendo fin al reinado de Il Cavaliere en la política nacional. En 2009 se publicaron imágenes, tomadas por el fotógrafo Antonello Zappadu en las que aparecían jóvenes menores de edad.

Según ha informado el diario italiano Corriere della Sera, Berlusconi pretende vender la mansión por unos 500 millones de euros y los principales interesados serían los Bin Nayef, que gobiernan en Arabia Saudí. Al parecer, el príncipe heredero, Mohammed, visitó el lugar la semana pasada, pero "no ha habido más avances", explicó una persona próxima. Otras fuentes señalaron que quien realmente está interesado es su tío, el rey Salman. Al parecer fue el propio Berlusconi quien enseñó en persona la mansión al príncipe Nayef.

Vila Certosa, ubicada en la Costa Esmeralda, cuenta con unas 20 hectáreas de terreno que albergan una lujosa mansión con seis piscinas, un pequeño club náutico e incluso un volcán artificial que entra en erupción a capricho del propietario.