La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Los expertos detectan brotes de patógenos característicos de agua dulce en los océanos

La ULPGC se postula como laboratorio de referencia en Sanidad Animal del sur europeo

Brian Austin. YAIZA SOCORRO

La comunidad científica internacional se enfrenta en la actualidad a la aparición de enfermedades cada vez más agresivas en hábitats poco habituales, según apuntó ayer Brian Austin, profesor de la Universidad de Stirling (Reino Unido), que ayer inauguró la XVII edición del Congreso Internacional sobre Enfermedades de Pescados y Mariscos que se celebra en la capital grancanaria, con la conferencia Cambiando el Dogma en la investigación de las enfermedades de peces durante 40 años.

Austin indicó como ejemplo, la aeromona sarmonicida, un patógeno que produce forunculosis. "Tradicionalmente era un patógeno de agua dulce, de agua continental, pero ahora han ido apareciendo brotes en aguas marinas, y también se ha trasladado a especies en las que antes no aparecían como son las carpas, y está siendo un problema importante. Lo mismo pasa con algunas especies de víbrios", indicó el científico.

Entre las causas de dichos cambios, Brian Austin apuntó a una combinación de efectos que se han ido sucediendo en los últimos años, como es el caso de la mejora del diagnóstico por un lado, y por otro los movimientos de especies de cultivos (acuicultura) de unos lugares a otros.

"Hoy en día se diagnostica mucho mejor y esto permite que sepamos con exactitud la presencia actual de esas enfermedades. Por otro lado, también se ha producido un movimiento más claro de lo que son especies portadoras de estos procesos que por las condiciones actuales facilitan que estas enfermedades se muevan de un sitio a otro más fácilmente con el desarrollo de la acuicultura moderna y aparezcan en sitios que antes no estaban.

Apuntó al respecto que existen muchas especies que puedan servir como portadoras de enfermedades. "Especialmente tiene mucha importancia el hecho de que se muevan los huevos de estas especies de un sitio a otro y cuando nosotros no tenemos control sanitario sobre esos huevos, o no los desinfectamos previamente, estos transportan al nuevo sitio el agente patógeno, lo que hace que se desarrolle la enfermedad allí a posteriori. Esto ocurre de forma general, en el Mediterráneo, el norte de África, en el Atlántico y en todas las zonas donde se ha producido un avance importante de la acuicultura. Las grandes explotaciones que han ido surgiendo son zonas de riesgo y su control son un reto para la comunidad científica".

Otro de los retos que apuntó el investigador de la Universidad de Stirling es la creación de métodos de diagnóstico cada vez más precisos. "En muchos casos es difícil poner el nombre exacto de la enfermedad porque a veces hay muchos patógenos que pueden estar implicados en un mismo proceso. El diagnóstico, por tanto, sigue siendo un reto a pesar de que se ha avanzado muchísimo en este campo", resaltó el profesor Austin.

Compartir el artículo

stats