La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Entrevista

Halffter: "Ha sido una gran decepción no poder renovar mi labor con la Filarmónica"

El director titular de la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria concluirá su trayectoria como titular el próximo año 2016

Halffter: "Ha sido una gran decepción no poder renovar mi labor con la Filarmónica"

¿Cómo definiría esta temporada que concluye cuando usted abandone completamente la titularidad de la orquesta?

La definiría como un periodo de transición hacia una nueva etapa. Es importante que se realice de forma bien estructurada y que no se pierdan todas las cosas positivas que se han conseguido. No existe por mi parte ni de los músicos la voluntad de que se produzca una ruptura radical, sino algo bien planeado, estructurado, y siempre pensando en el bien de la orquesta y del público. Ademas, todavía tenemos proyectos que podemos seguir haciendo. Por ejemplo, hay una obra importante para el final de esta temporada como la versión en concierto de la ópera El emperador de la Atlántida.

¿Seguirá vinculado de alguna manera con la orquesta?

No me gustaría perder la relación con la Filarmónica de Gran Canaria, donde he sido muy feliz como director durante estos últimos doce años, y con la cual he vivido grandes experiencias aparte de los conciertos, las grabaciones o las giras nacionales e internacionales. Es necesario que el próximo director sea elegido de forma consensuada tal y como está estipulado en los estatutos, pero que sea elegido entre esa comisión artística, con los representantes de la orquesta entre los que yo me encuentro, y con los representantes políticos. Hay que hacer una transición sin ninguna ruptura, en colaboración con los músicos, para que la orquesta no se vea afectada por ningún cambio, sino que pueda entregarla en perfecta condiciones para que funcione, y el próximo director realizar su trabajo.

¿Por qué no expresó su deseo de continuar en ella?

Yo estaba esperando reunirme con los nuevos miembros del Cabildo cuando recibí un burofax con la decisión tomada. Para mí ha sido una gran decepción. Existía una cláusula en mi contrato que decía que si ninguna de las partes expresaba su voluntad de continuar, se daba como extinguido. Yo estaba esperando la posición del Cabildo de Gran Canaria con respecto a lo que iba a hacer, quería que ellos tomaran primero la decisión. Y quería ver si por parte del Cabildo había interés. Si quieren seguir conmigo perfecto. Y si no quieren seguir conmigo había que tomar otro camino a seguir. Yo podría pensar que mi camino con la orquesta habría terminado. Pero una cosa es ser director artístico y otra director titular. El día a día con el músico es muy complicado. Un director artístico podría tener una vida más larga porque el trabajo diario es extremadamente demandante.

¿Le afectó quizás de algún modo la huelga del año pasado?

Quiero dejar claro que no iba dirigida en contra mía. Era una huelga por cuestiones laborales y por los conflictos que tenían con el gerente, ya que no existía nada referente a la dirección titular y artística en sus demandas, sino un conflicto con respecto a dos plazas de la orquesta que se estaban cubriendo. Luego había una denuncia de un miembro de la orquesta sobre una situación laboral de determinada.

¿Se ha sentido cómodo con el nuevo grupo de gobierno en el Cabildo de Gran Canaria?

He tenido la oportunidad de reunirme con el presidente del Cabildo hace unos días y hemos tenido una relación cordial. Yo estoy siempre a disposición de lo que sea mejor para la orquesta . He vivido momentos muy emocionantes, y he dejado muchos instantes de mi vida en ella, y a todos los políticos que apostaron por mí siempre les estaré agradecido. Es mi primera orquesta como director titular, y lo será para toda mi vida. Todavía me acuerdo cuando se logró cerrar el acuerdo. Fue una emoción enorme. Un dato personal que indica mi implicación es que se dio la circunstancia de que mi segundo hijo nació mientras yo estaba tocando con la orquesta. Era un concierto muy importante que teníamos que hacer al día siguiente. Surgió así, lo hablé con mi mujer y no pude conocer a mi hijo hasta pasados tres días. Fue un sacrificio a nivel personal. Y lo hice como un modo de fidelidad hacia este trabajo.

¿Si hubiese estado otro partido político al frente del Cabildo cree que se hubiesen acercado a usted para que renovara?

Estamos hablando de política ficción. Hay que dejar una cosa clara, cuando fui nombrado en Sevilla me nombró el partido Socialista. Y cuando me nombraron aquí en Las Palmas me nombró el Partido Popular. Yo renové mi contrato en Sevilla con el Partido Popular, y renové aquí con el Partido Socialista, y luego volví a renovar con el Partido Popular. Tengo buena relación con todos los partidos. Y se da las circunstancias que fui nombrado por los dos y renovado por el partido contrario. Creo que mi trabajo está, sobre todo, dirigido al público. Mi agradecimiento debe ir sobre todo a los músicos. Cuando salen al escenario son todos estupendos y se dejan el alma en los todos los conciertos.

¿Cuáles han sido lo momentos más emocionantes?

La gira por Japón fue extraordinaria, o los conciertos que hemos hecho en Madrid. También las giras por Alemania y China. En Alemania fue una experiencia muy dura porque teníamos conciertos prácticamente todos los días. Tuvimos un 100 x 100 de ocupación en todos los auditorios en los que tocamos. Y lo mismo en Japón

¿Y los mayores logros?

Destacaría sobre todo la fidelidad del público y las actividades pedagógicas ejemplares. Hemos conseguido hacer giras muy importantes y exitosas. Hemos conseguido grabar en el sello más importante y hemos conseguido difundir la orquesta de una manera mucho más ambiciosa a nivel de la isla. A ello fue determinante la colaboración con Sting. Antes a nivel insular no se conocía tanto la labor y la calidad de la orquesta, y, de pronto, nos encontramos en medio del Estadio de Gran Canaria ante 12.000 personas. También han sido muy positivos los conciertos en el Temudas Fest a los que cada año viene más público. Los conciertos con José Vélez y José Feliciano tuvieron un gran pacto social. Previamente habíamos interpretado conciertos con artistas canarios como el que hicimos en 2005 con Mary Sánchez. También hemos trabajado con los municipios, y hemos inaugurado los auditorios en Agüimes, Teror o Valleseco. Así se crea una infraestructura muy fuerte y nuestro próximo paso es que estos auditorios formen parte de la programación de la orquesta. El grancanario que vive aquí y tiene una orquesta tan maravillosa, debe poder disfrutarla en cualquier sitio en que viva.

¿Tiene un perfil de cómo debe ser el nuevo director?

Es un trabajo que debemos desempeñar entre los miembros de la orquesta y lo políticos. A lo mejor nos lleva algún tiempo. Pero se pueda invitar a diferentes directores y y saber si quiere un director mayor o uno más joven, etc. Hay que ver lo que cada uno puede aportar. Y podemos hablar entre todos los miembros. Hay que ver cómo el público reacciona. Y la orquesta debe mantener su calidad.

¿De qué modo ha afectado la actual crisis a la orquesta?

Hay que dejar claro que todas las orquestas de España han pasado una crisis muy dura, donde en muchos lugares la cultura ha tenido muchísimos recortes y ha sufrido muchos retrocesos en la calidad. Pero, con el esfuerzo de todos, y el apoyo del Cabildo de Gran Canaria, nosotros hemos conseguimos mantener la calidad de la Filarmónica e ir renovando algunas de aquellas plazas que se iban quedando vacantes.

¿Dónde se va a centrar su trabajo a partir de 2016?

Sigo siendo director artístico del Teatro La Maestranza. Y tengo muchas invitaciones como director en teatros y orquestas. También diversas opciones donde puedo seguir mi carrera como director estable de una orquesta o un teatro.

¿Le han llegado ofertas interesantes para ser director titular de otras orquestas?

Algunos teatros de ópera alemanes me propusieron ser director titular y ahora también existen varias opciones.

Durante estos doce años usted ha estado viajando continuamente entre Madrid, Sevilla y Las Palmas.

Eso no me ha impedido tener una actividad con muchas de las mejores orquestas del país. Y no solo eso. El año pasado inauguré la temporada en la ópera de Munich. Estuve en verano en Pekín. Precisamente, a partir de 2016, voy a tener más actividad en la función de director invitado. No estar en el día al día. Porque el trabajo del director titular tiene también mucho que ver con circunstancias de carácter administrativo y no con el hecho musical en sí. Y eso me va a ayudar a tener más actividad en lo puramente musical.

¿Cree que las Islas Canarias tienen una vinculación con la música mucho más importante de lo que se conoce?

Hay un dato importante. En 1818, en vida de Beethoven, se adquirieron en Gran Canaria tres sinfonías suyas. Me parece un dato de enorme importancia. Eso demuestra los enorme cultura musical de Gran Canaria. Y es importante vincular a la isla con compositores como Saint-Saëns que estuvo aquí muchas veces. En las programaciones de todos los años tocamos, al menos, una obra suya. El quinto concierto de piano lo escribió en parte en Gran Canaria .

El pasado viernes incluyó en el programa de la orquesta, precisamente, su obra Las campanas de Gran Canaria.

La obra toma como referente de inspiración una pieza para piano de Saint-Saëns. Está concebida como una meditación sonora. Cada vez que se toca Las campanas de Gran Canaria, suena el nombre de la isla. Yo no creo que Aranjuez fuese un pueblo conocido en el mundo entero si no existiese un concierto de guitarra que se llama El concierto de Aranjuez. Vamos a intentar lo mismo con una obra musical dedicada a esta isla. Gran Canaria es una isla de música que yo he intentado difundir a través de mi trabajo. Otras obras como El ocaso de los dioses se van a interpretar mucho en Alemania y para mí es un orgullo que ponga en el programa que fue estrenada por la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria en el auditorio Alfredo Kraus. Eso es un legado muy importante que espero que, cuando pase el tiempo, quede como un bien de la orquesta. Que no es solo un paso musical, sino que deja un poso de relevancia internacional.

Usted siempre ha elogiado la obra de Wagner. ¿Hay que tener una sensibilidad especial para llegar bien a su música?

Estamos en la época de la falta de matices y de tiempo. Y Wagner vive de matices y necesita tiempo. Para acercarse hay que hacerlo poco a poco, no querer abarcarla toda a la vez. Pero cuando uno ha sentido la música de Wagner lo difícil es resistirse. Es conocer, y dejarse trasladar a otro mundo. Es como asistir a un hecho cultural de grandes dimensiones.

¿Cómo recuerda su participación como invitado en el Festival de Ópera de Munich?

Fue estar en el mejor festival de ópera del Mundo. Estar allí es como estar en la casa de Strauss, y dirigiendo una obra de Strauss. Creo que he sido el único director español que ha tenido ese privilegio. Después tuvimos, además, unas críticas magníficas y estoy invitado a trabajar con ellos en el futuro.

Usted siempre ha destacado las particularidades positivas del Auditorio Alfredo Kraus.

Es un lugar extraordinario para conciertos. Recuerdo estar dirigiendo, por ejemplo, una sinfonía de Brahms o de Mahler y, poco a poco, ver el ocaso detrás de la gran ventana . Es un privilegio único. Y además está la calidez del público.

¿Cómo ha sido su relación con los músicos?

Muy cercano y fructífera. Pero eso no quita para que nos esforcemos mucho en los ensayos a buscar la perfección. Todos los músicos tienen una gran profesionalidad dentro de la orquesta.

¿Cree que el trabajo de los músicos de la orquesta no están lo suficientemente valorados?

Creo que no. Es un trabajo muy duro. Cada instrumento tiene unas enormes dificultades y necesita mucho trabajo. Tienen que tener mucha horas de estudio y además se une el estrés del concierto. Cada músico asume una gran responsabilidad cada vez que actúa ante el público. Uno tiene que graduar los ensayos para que la orquesta llegue al mejor rendimiento durante los conciertos. Uno tiene que trabajar con la psicología para que rinda lo mejor en el concierto. Sería bueno que se ayudase a comprender la dificultad que conlleva ser músico. Son microatletas de alto rendimiento. Nosotros estamos a un mismo nivel que cualquier orquesta importante europea y esto solamente es posible gracias al duro trabajo de los músicos de la Filarmónica. Si nosotros estamos a un mismo nivel que cualquier orquesta importante europea es porque se exige un trabajo diario de cada miembro. Me gustaría destacar la excelente calidad y entrega que tiene el Coro de la Filarmónica, así como de la importantísima labor que realiza la academia.

¿Cuáles son los aspectos que conllevan una mayor dificultad?

Cada instrumento tiene una dificultad característica. La trompa, por ejemplo, es un instrumento de muy difícil afinación. Si el músico tiene que hacer un solo complicado como Sigfrido o en la Quinta de Chaikovski, tiene que tener mucha horas de estudio y capacidad de concentración enorme. Y también es importante la postura física, que se va supliendo con experiencia y conocimiento. Instrumentos de madera como el fagot, el oboe o la flauta, si las condiciones de la sala crean más calor, puede provocar que el agua entre en las boquillas y producir unos fallos que generan tensión en el músico y un estrés tremendo. O también tenemos a los violinistas o contrabajistas con sus problemas musculares.

Usted tiene una vinculación familiar con las Islas.

Mi mujer vive en Madrid, pero nació aquí, en Las Palmas de Gran Canaria. Mi suegro nació en Lanzarote. Mis hijos se llaman Lorenzo y Cayetano Halffter Perdomo-Spínola, y por eso hay una cuestión especialmente afectiva con esa Isla. A ellos les encanta venir aquí, porque se sienten muy bien con el clima y la playa. Y yo espero también seguir haciéndolo.

Compartir el artículo

stats