La zaarzuela de Canarias afronta los dos últimos títulos de la presente Temporada "bajo la amenaza de déficit económico". Así lo señaló ayer, la vicepresidenta de Amigos Canarios de la Zarzuela, Argelia Camino, durante la presentación de Me llaman la presumida, de Francisco Alonso, y Los gavilanes, de Jacinto Guerrero, programados para el 17 y el 24 de octubre, respectivamente, en el Teatro Cuyás.
"La temporada podría verse abocada a la desaparición por falta de financiación si no recibe mayores ayudas públicas este mismo año", aseguró Camino, que calificó de "milagro" el que puedan seguir presentando obras con un presupuesto total de 130.000 euros, frente los 440.000 de hace un lustro.
Camino, que asistió acompañada de la directora general de Cultura del Gobierno de Canarias, Aurora Moreno, y el consejero del sector del Cabildo de Gran Canaria, Carlos Ruiz, recordó que una zarzuela media viene a salir por 40.000 o 50.000 euros y una temporada ha de incluir tres como mínimo para ser considerada como tal por el Ministerio de Cultura, que solo contribuye a su sostenimiento si conserva esa catalogación.
La vicepresidenta, que aclaró que del presupuesto, 62.000 euros son de subvenciones, añadió que si se ha conseguido organizar esta edición ha sido gracias al "voluntariado de muchas personas que trabajan desinteresadamente en ella y a la buena disposición de los cantantes contratados", en su mayoría artistas locales que participan cobrando cantidades "casi ridículas", desde la idea de que estar en el festival prestigia sus carreras.
Sobre la programación, Camino señaló que Me llaman la presumida es "un título novedoso en Canarias, aunque es una zarzuela antigua", y Los gavinales un espectáculo "emblemático" del género, al ser "una de las más representativas del maestro Guerrero". El reparto de ambos títulos lo integran casi al completo artistas canarios, algo de lo que ha dicho que están "orgullosos" ya que ha contribuido a que haya cantantes locales de calidad, excepto Enrique Sánchez, barítono nacido en Aranjuez, el tenor cántabro Alejandro González y el actor asturiano Didier Otaola.
Aurora Moreno señaló a continuación que "estamos dispuestos a sentarnos a negociar con la asociación" para poder aumentar el presupuesto, por lo menos, a lo que había antes de la crisis. Carlos Ruiz, finalmente, mostró su voluntad de "seguir apoyando el festival", con el propósito de "recuperar el nivel" de ayuda que se le otorgaba antes.
