¿Cómo define el espectáculo Por humor al arte, que trae el próximo mes a Gran Canaria?
A grandes rasgos, Por humor al arte es un despelote, un cachondeo total. Ya estuve con el espectáculo hace unos años en Canarias, pero esta vez vuelvo con Paco Arévalo en una nueva versión en la que yo encarno a Doña Inés, mientras que Arévalo hace de Don Juan Tenorio. Así que mucha diversión, mucha música y, sobre todo, el público se ríe muchísimo y nosotros nos lo pasamos genial.
¿Cómo surge esta pieza a dúo con su amigo Paco Arévalo?
Pues ya llevamos cinco años con este espectáculo y la idea fue de Paco Arévalo, creo recordar. Arévalo y yo somos amigos desde hace 30 años y nos llevamos totalmente bien, tanto dentro como fuera del teatro. Nunca hemos discutido por nada y creo que esa relación se transmite en el escenario.
¿Cuesta hacer reír?
Durante estos cinco años, cada año hemos tenido a más y más público y, por último, estamos con los teatros hasta arriba. No creo que sea difícil hacer reír, al menos, para mí. También es verdad que la gente nos conoce y viene animada, o puede ser que ahora necesitemos la risa más que nunca. Cuando las cosas van mal, el humor es totalmente necesario.
En tu casa o en la mía logra un gran tirón mediático, ¿con qué momento se queda entre los vividos hasta ahora?
Pues hemos vivido muchísimos momentos y muy variados. Tal vez la vivencia que más me ha sorprendido por el papel que tomaron los invitados han sido dos políticos, que aparecerán en los programas de las dos próximas semanas. Ver a Mariano Rajoy cortando queso, tomándose copas y gastando bromas; y por otra parte, ver a Pedro Sánchez jugando al ping-pong mientras responde a mis preguntas, ha sido toda una sorpresa. Lo pasamos muy bien.
Entre todas las personalidades que han visitado su casa, ¿quién ha sido un hallazgo?
Es una pregunta difícil. Pero, ahora que lo pienso, diría que Mario Vaquerizo. Ya conocía su programa Alaska y Mario, pero nunca lo había tratado tan de cerca como en mi programa, que aún no se ha emitido. Creo que Mario es la persona que más me ha sorprendido porque es un auténtico despelote, una persona divertidísima. Lo pasamos muy bien.
Aunque siempre ha estado bajo los focos mediáticos, ¿qué ha supuesto regresar a la primera línea de la parrilla televisiva?
Ha sido complicado. Después de varios años sin estar en televisión, volver ha sido realmente como empezar de cero. Por supuesto, ha sido una maravilla regresar con un pelotazo así de gordo, que, si lo piensas, no es algo del todo normal. Pero la fama es complicada. Me quedo con el cariño de la gente, que ha sido algo impresionante, inimaginable, insólito.
¿Cómo es hoy el día a día de Bertín Osborne?
Pues... No vivo (ríe). Es complicado. Ahora mismo, tengo muchas cosas a la vez porque, aparte del programa, hago teatro, saqué disco hace una semana y, además, tengo mi empresa de alimentación, a la que dedico mucho tiempo. Maravilloso, pero agotador.
Presentador, actor, cantante... ¿Con qué faceta se queda?
La música, probablemente. Siento que, ante todo, soy cantante, porque es lo que más me gusta, es donde mejor lo paso y siempre estoy comodísimo cuando canto. Por eso ando ilusionado con empezar la gira de mi nuevo disco, Crooner, el próximo año.
¿Cuáles son sus expectativas de cara a los comicios generales el próximo 20 de diciembre?
Me da exactamente igual lo que suceda. Mira, en mi programa me he entrevistado con Mariano Rajoy y Pedro Sánchez, y me caen genial los dos. Así que, por mí, que gane el mejor. Vivo estas elecciones con presión cero, tensión cero.
