La sonda europea Rosetta ha detectado amplias regiones de agua helada en la superficie del cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko, en el que hasta ahora solo se había encontrado el rastro de diminutos cristales de hielo, según un estudio publicado ayer por la revista Nature.

A partir de observaciones en luz infrarroja, científicos del Instituto Nacional de Astrofísica de Italia han observado abundante hielo en dos barrancos de la región del cometa bautizada como Imhotep. La misión Rosetta ya había detectado vapor de agua en 67P, y se sabe que el agua es uno de los mayores constituyentes del núcleo del cometa. Sin embargo, como en otros cuerpos similares, 67P no presentaba hasta ahora regiones en las que el hielo quede expuesto en la superficie.

Gianrico Filacchione y su grupo han descubierto en cambio que en las paredes y la base de esos dos barrancos existe una capa de hielo externa.