El Gobierno de Canarias elabora un indicador de calidad docente que, como parte de las funciones del Servicio de Inspección de la Consejería de Educación, se realiza por medio del análisis y supervisión de la labor del profesorado en sus propias aulas. Esta inspección tiene como objetivo mejorar el nivel educativo de las Islas y los procesos de enseñanza y aprendizaje. Para ello, 63 inspectores visitarán 126 centros de enseñanza obligatoria del Archipiélago de los cerca de 900 que existen, para asistir a los primeros ciclos de la Educación Primaria y los cursos de tránsito, como 6º de Primaria y 1º y 2º de Secundaria. Tras esto se elaborará un documento que servirá a modo de asesoramiento con el propósito de extender las buenas prácticas docentes de algunos centros al resto de la comunidad.
A lo largo de un mes se analizarán aspectos como las programaciones, la práctica docente, los sistemas de evaluación y las competencias del alumnado, con el objetivo de "mejorar el sistema", según aseguró el viceconsejero de Educación, Juan Manuel Santana.
Desde la Consejería se explica que esta iniciativa, que se retomó en el curso 2013-2014, no tiene un objetivo fiscalizador sobre los profesores sino que se plantea como un herramienta para aportar soluciones. La finalidad de esta evaluación, que se realizará entre el 15 de febrero y el 18 de marzo en 63 colegios y 63 institutos, consiste en asesorar, apoyar y acompañar al profesorado en el proceso de mejora de la práctica docente. Además se propone detectar las buenas prácticas realizadas para propiciar su difusión e implementación y reconducir las deficiencias o carencias observadas. El fin último consiste en mejorar el rendimiento escolar; reducir el absentismo y abandono y mejorar las tasas de titulación e idoneidad.
El lunes pasado comenzó el proceso evaluador. En una primera fase el inspector de cada zona se reunirá con los directores de los centros que le correspondan para informarles del método elegido, los indicadores a evaluar y le hará entrega del protocolo de actuaciones. En este momento se determinará la fecha en que se realizará la visita, con una semana de margen, a la que acudirá con un segundo inspector para asistir a las clases. Estos estarán acompañados en el aula por el director o un jefe de estudios. Por último, tras finalizar el periodo de visitas el 18 de marzo, se entregará a los centros, durante el mes de abril, un informe con las conclusiones, los aspectos positivos y las propuestas de mejora. Esta iniciativa se enmarca en la Ley Canaria de Educación de 2014 y, en la misma, se describe esta labor de supervisión como una tarea "esencial" para el buen funcionamiento de colegios e institutos.
