Trabajar en edades tempranas las habilidades sociales, la resolución de conflictos y la autoestima revierte en adolescentes y jóvenes más fuertes a la hora de afrontar conflictos y, por tanto, menos susceptibles de caer en las redes de las drogas. Este es el planteamiento del programa Nino y Nina que ha trabajado hasta el momento con 1.150 niños, de entre tres y cinco años de edad, de una quincena de centros educativos canarios.
Este proyecto es uno de los primeros dentro del territorio nacional dirigido específicamente a prevenir conductas de riesgo desde la escuela infantil. La coordinadora de la iniciativa, la psicóloga Lorena Crusellas, asegura que, aunque es difícil de demostrar los resultados trabajando en edades tan tempranas, sí se han constado cambios muy positivos en los alumnos.
Entre otras cuestiones, se ha demostrado que, después de estas sesiones prácticas, los alumnos tienen un mayor autocontrol y disciplina, más autoestima y competencia social, y reconocen y expresan con mayor facilidad las emociones, incrementando además su vocabulario emocional. "Es importante aprender la capacidad de regular las emociones, de conocerlas, de diferenciarlas de los demás y de saber expresarlas. Los profesores nos revelan que, después del programa, los alumnos son más autónomos, ya no pegan a sus compañeros y la relación con los demás era más positiva", señala Crusellas.
La psicóloga incide en que es muy importante establecer una base sólida de autoestima porque normalmente las intervenciones sobre prevención de drogodependencia se centran en los adolescentes, una edad en la que ya es "muy difícil" trabajar este aspecto. En general, Crusellas concluye que los alumnos de infantil consiguen ser más autónomos, más positivos y menos agresivos con sus semejantes.
"Partimos de la evidencia de que los niños con fortalezas en resolución de conflictos y autoestima son después más fuertes a la hora de afrontar conflictos en la adolescencia y la juventud. Pero no sólo se trata de evitar la drogodependencia, sino también la violencia o el acoso escolar", comenta Ricardo Redondas, director general de Salud Pública, organismo que financia dicha iniciativa.
Redondas explicó que actualmente existen múltiples proyectos de promoción de la salud y de prevención de la drogodependencia, algunos llevados directamente por Salud Púbica y otros en colaboración con varias organizaciones.
El programa Nino y Nina, que recibe el nombre de sus dos personajes protagonistas, trabaja de forma lúdica las habilidades sociales a través de 40 sesiones prácticas, estructuradas en formato de historias, juegos y actividades. Para ello, establece como soporte un juego de cartas para promover la capacidad de identificación y diferenciación emocional. El programa se ha desarrollado en el ámbito escolar desde octubre de 2014 hasta diciembre de 2015, en los municipios de La Laguna (Tenerife) y Agüimes (Gran Canaria) teniendo como destinatarios directos a 1.150 niños de 15 colegios, distribuidos en 38 grupos de 1o y 2o de Infantil.
