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La música como medicina

Una veintena de pacientes del Centro Sociosanitario El Pino asisten a un taller terapéutico de la Orquesta Filarmónica

La musicoterapeuta, Mari Carmen González, con los pacientes. S. CEBALLOS

Las facultades curativas de la música han sido estudiadas y reconocidas continuamente por la comunidad científica, y los centros de salud más importantes del mundo la han ido incorporando poco a poco entre sus actividades. Y no es para menos, porque el calificado como "arte supremo" por el filósofo alemán Arthur Schopenhauer, facilita entre otras cosas, el contacto, la interacción, el aprendizaje y el desarrollo personal. Por este motivo, el Centro Sociosanitario El Pino de Las Palmas de Gran Canaria, celebra desde el pasado mes de enero, el taller Música útil con el objetivo de estimular la mente, potenciar las habilidades sociales y relajar el estado anímico de sus pacientes. Un programa de actividades del que la OFGC ha sido adjudicataria en el Programa de Ayudas a Iniciativas Sociales de La Caixa, el Gobierno canario y CajaCanarias.

La directora de coros de la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria, Marcela Garrón, junto a la musicoterapeuta Mari Carmen González, son las encargadas de impartir estas clases en las que participa en estos momentos un grupo de veinte alumnos, la mayor parte de la tercer edad, pero que demuestran una inteligencia y una coordinación rítmica que han desconcertado a las propias profesoras.

Precisamente, Garrón aclara desde el principio que no se ha elegido a un grupo en especial, ni por la edad, ni por la tipología de su caso concreto. "El hecho de que sean la mayoría de la tercera edad es meramente circunstancia", señala.

Ternura

"Los mayores son solo mayores, pero aquí son unas personas que demuestran una ternura e inteligencia tremendas. Un día les explico escalas o arpegios, otro hacemos acordes, y casi siempre cantamos canciones. Suelen ser cosas sencillas. Ciertamente, a ellos lo que más les cuesta es aprender letras nuevas, pero en las que ya conocían te dan 20 vueltas. Les pones un bolero o un aria de zarzuela y se ponen a cantar a gritos. A veces incluso me dicen 'Marcela te has saltado una estrofa'. Eso les va mejor".

Para la directora de coros, se trata también de "un momento de distracción y sonrisas. Eso les hace sentir bien durante ese momento. Hace poco centré las clases en reconocer la diferencia entre pop, rock y clásico. Y cuando les pongo el rock and roll se privan, le gusta a todo el mundo. La música está muy presente en su día a día. Durante la eucaristía tienen su misa".

Por su parte, Mari Carmen González reconoce que "les enseñamos actividades personalizadas para cada uno de ellos. Es un grupo muy agradecido. Y hay clases de vocal, instrumental y corporal". Para la musicoterapeuta "no se trata de obtener beneficios de inmediato, sino a largo plazo. Es una disciplina que tiene muchos años de implantación a nivel mundial".

Los alumnos se mostraban entusiasmados con el proyecto. Santiago Marrero Bolaños reconocía que "no sabía nada sobre este método, he trabajado en muchos sitios pero nunca creía que aprendería música y aprender siempre es bueno". Algo parecido opinaba Rosa María García Doreste que reconocía que "a mí me resulta positivo. Y es una de las actividades que más nos gusta a todos los compañeros. Es una hora y media de disfrutar y a prender también", dijo.

El consejero de Cultura del Cabildo grancanario y presidente de la Fundación Orquesta Filarmónica de Gran Canaria, Carlos Ruiz, y la presidenta del Instituto de Atención Social y Sociosanitaria, Elena Máñez, visitaban el taller por la mañana y tuvieron un encuentro con los medios. Ruiz señalaba que es el compromiso social de la Orquesta Filarmónica es facilitar una ayuda importante a las personas mayores o con un tipo de problema mental, con un importe otorgado de más de 9000 euros. "Llevamos años realizando labores sociales y esta es una más", aclaró. "Viéndole la cara sabemos que los pacientes están disfrutando. Y el objetivo que persigue es mejorar la calidad de vida de las personas No descartamos en seguir trabajando en este aspecto. Y ya hemos presentado otro proyecto que, esperemos, también se apruebe". El consejero de Cultura recordó que las actividades se enmarcan dentro del compromiso de la orquesta "que tiene que devolverle a la sociedad canaria lo que ella nos han dado", y se une a los anteriores proyectos Guanarteme para la Mejora Social y Mosaicos de Sonidos.

Elena Máñez, a continuación, subrayó el que "queremos que nuestros mayores puedan disfrutar de una actividad tan fantástica como la música, que les permita mejorar sus capacidades, su autoestima, y hacerlo con la Orquesta Filarmónica es todo un lujo." En su opinión, "la música nos afecta. Cualquier estímulo es positivo de cara al bienestar y pueden desarrollar mejor sus capacidades". Por el momento, las actividades se realizarán hasta mayo con las personas de esta residencia, "pero esperamos compartir más actividades".

Un amplio repertorio que va desde canciones como Angelitos negros de Negrín a Solamente una vez de Alejandro Solís fueron algunos de los temas que los pacientes y residentes cantaron entusiasmados. Por lo pronto, está previsto que acudan próximamente músicos de las orquesta que realizarán algunas actividades específicas. Un proyecto estimulante que, desde luego, ya ha tenido sus efectos positivos en la salud de los pacientes.

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