Carmen Machi asegura que, "aunque parezca lo contrario", en su carrera ha hecho más papeles dramáticos que cómicos y que hacer drama le gusta más que hacer comedia, ya que hacer reír le parece muy "difícil y agotador". La popular actriz, que es conocida por el público principalmente por sus papeles cómicos en series de televisión (Siete vidas, Aída) y cine (Ocho apellidos vascos, Los amantes pasajeros), ha recibido el Premio de Honor de la Mostra de Cine Latinoamericano de Cataluña, que se celebró el fin de semana en Lérida.

"Ya sé que mucha gente me conoce por Aída o por Ocho apellidos vascos, pero no he hecho tantos personajes de comedia como la gente puede pensar. De hecho, he interpretado más drama que comedia, tanto en cine como en teatro, lo que pasa es que los personajes cómicos han tenido más difusión", asegura la actriz.

En cualquier caso, y también en contra de lo que se pudiera pensar, afirma que es más difícil hacer comedia que drama o tragedia: "Para mí hacer comedia es más complejo, difícil, cansado e intenso que el drama, porque requiere un resultado para el que lo ve o lo escucha, es como dar un salto mortal continuamente, requiere un esfuerzo triple", explica.

En cambio, la actriz dice disfrutar mucho haciendo drama, "porque te saca emociones muy divertidas". "El llorar por lo que le está pasando a otro es muy estimulante y divierte, porque además luego es mentira. Además, mucha gente piensa que se hace comedia riendo y normalmente cuando haces comedia no te ríes, ni te lo pasas bien, estás trabajando, estás diciendo un texto que no es tuyo. En cambio el drama e incluso tragedia, me divierte", explica.

También contra pronóstico dice no sentirse marcada por el personaje de Aída, que interpretó durante más de diez años en las series de televisión Siete vidas y el spin-off bautizado con el nombre de su personaje.

"No considero que me haya marcado Aída, nunca he estado pendiente de ello. He interpretado a más de cien personajes en mi carrera y siempre cuando los acabo me olvido de ellos y ya está, el disco duro hay que despejarlo para que entre algo nuevo. Que es un personaje que ha trascendido mucho y que a mí me ha dado muchas alegrías, eso es indudable, pero como muchos otros", explica.

Además, Machi siempre ha compaginado sus trabajos en tele o cine con el teatro: "El público piensa que Aída es lo que más ha invadido mi vida, pero no es real, porque cuando yo estaba haciendo Aída hice 20 funciones de teatro a la vez y también películas", recuerda.

También participará en Pieles, el primer largometraje de Eduardo Casanova (su compañero Fidel en Aída), del que asegura que tiene "un talento descomunal" y que es "un artista en potencia y un crack".