Un fósil de 26 millones de años deun antepasado de los odontocenos, un subgrupo donde se encuentran los cetáceos dentados, ofrece pistas sobre el origen del oído y la comunicación de los delfines, según un estudio realizado en Australia. Los delfines modernos y otras ballenas dentadas utilizan frecuencias complejas sonoras para comunicarse entre sí, navegar las aguas profundas y cazar.