Maribel Verdú se encuentra por primera vez en Fuerteventura. "Me parece un lugar maravilloso", aseguró ayer en pleno rodaje de El faro de las orcas, una experiencia que calificó igualmente "maravillosa" desde que comenzó su periplo en Patagonia. Además, Verdú aseguró que se habla mucho de Canarias en Madrid por las bonificaciones fiscales a las producciones cinematográficas. "Por mí, perfecto. Ojalá nos traigan más", señaló.
La actriz madrileña, propietaria de dos Premios Goya y el honor de ser la actriz con más nominaciones, se congratuló por el hecho de poder trabajar con Gerardo Olivares, "tu colega, tu cómplice, tu hermano mayor y tu director", y del niño Joaquín Rapalini Olivella, de diez años y al que calificó como un actor de presente y gran futuro.
"Quinchu -como le conocen en el set- es de lo mejor que me ha pasado en mi carrera. Lo adoro. Tenemos mucha complicidad y buen rollo. Es la perfección hecho niño. Dicen acción y te rompe el corazón", aseguró entregada en elogios.
Maribel Verdú apunta que le atrajo el guión. "Me pareció una historia apasionante y real. Es la historia de una madre coraje y de su hijo que nunca había sentido empatía con nada y con nadie desde que a los dos años le diagnosticaron autismo, hasta que vio las orcas y su madre se va al fin del mundo para ver si así le puede servir de terapia. Madre mía. Es algo que sabes que te vas a llevar en tu mochila siempre. Esta es la película en su extensa trayectoria en la que más ha trabajado con animales y naturaleza. "Nunca he tenido una experiencia tan potente y tan bestia. Es la naturaleza y tú. Punto. Patagonia es increíble".
Tras trabajar en Fuerteventura la actriz viaja al festival de Málaga, donde presenta La Punta del Iceberg del director canario David Cánovas y que es una adaptación del texto teatral del palmero Antonio Tabares. Se estrena el 29 en los cines.
"Leí la obra hace tiempo porque me la ofrecieron pero no pude hacerla. Luego, cuando dos años más tarde me la volvieron a ofrecer, quedó claro que yo debía ser Sofía Cuevas", expuso. Esta analizó la propuesta como "potente", al contar una historia "que te deja sin habla", pese a ser algo que real en las grandes empresas. "De hecho, parte del ejemplo de France Telecom hace unos años en el que se suicidaron 160 empleados".
