Los investigadores de la Universidad de La Laguna Javier Hernández y Rafael Arnay han desarrollado un sistema de detección de movimiento para que las sillas de rueda se puedan desplazar de forma autónoma por entornos cotidianos. Este avance en el campo de la robótica móvil, permite mejorar la fiabilidad de los sensores de bajo coste y suplir sus carencias.

El dispositivo de detección escogido por los científicos de la Escuela Superior de Ingeniería y Tecnología de la ULL, es el modelo Kinect de Microsoft de la videoconsola X-Box One. El funcionamiento de este sensor se basa en la emisión y recepción de luz infrarroja para calcular de forma precisa la distancia a los objetos en un rango cercano.

Para los investigadores, "este trabajo implica una reducción del coste de desarrollo y un aumento en la seguridad de los dispositivos", y para las sillas de ruedas supondrá "una rápida integración de las mismas en la sociedad, que beneficiará a aquellas personas que sufran de movilidad reducida". El objetivo del estudio es la detección de obstáculos y su localización tridimensional, para que un prototipo robótico pueda navegar de forma segura y libre de colisiones", apuntaron Hernández y Arnay.