Un equipo internacional de investigadores ha descubierto ingredientes considerados clave para el origen de la vida terrestre en el cometa (67/P) que la nave Rosetta de la Agencia Espacial Europea (ESA) lleva casi dos años estudiando. Entre ellos está la glicina, un aminoácido que suele encontrarse en las proteínas, y fósforo, un elemento fundamental del ADN y las membranas celulares.

Los científicos llevan mucho tiempo debatiendo la posibilidad de que el agua y las moléculas orgánicas, esenciales para que surgiese la vida, llegaran a la Tierra por medio de asteroides y cometas cuando ésta aún se estaba enfriando tras su formación. Las muestras que la misión Stardust de la NASA trajo del cometa Wild-2 en 2006 mostraban trazas del aminoácido más simple, la glicina. Sin embargo, una posible contaminación terrestre de las muestras de polvo dificultaba el análisis. Ahora, Rosetta detectó glicina de forma directa y repetidamente en la difusa atmósfera o "coma" de este cometa.

"Esta es la primera vez que detectamos glicina de forma inequívoca en un cometa", aseguró Kathrin Altwegg, principal investigadora del instrumento encargado de las mediciones.