Dos santanderinos, María Gómez y Francisco San José, protagonizaron este lunes la primera boda de la historia en la cima del Picu Urriellu o Naranjo de Bulnes. Con dos músicos como testigos y varios guardas de montaña presentes en la ceremonia, los novios se dieron el sí ante la concejala de Cabrales María Elena Martínez. La lluvia, el viento, el granizo y la nieve estuvieron a punto de dar al traste con el casamiento. Los guías de TocandoCumbre llevaron hasta la cima a los contrayentes, mientras que el guía de Sotres Cipriano López acompañó a la concejala, que es a la vez su esposa.

Fue una ceremonia "muy bonita" y "emocionante", señaló el novio, que destacó las grandes dificultades que surgieron durante el ascenso a causa del mal tiempo. Ninguno de los novios son escaladores profesionales, aunque sí son ambos amantes de la montaña y ya habían hollado la cima del Picu Urriellu.

El guarda del refugio de la vega de Urriellu Tomás Fernández destacó que ha sido la primera boda oficiada en el Picu. Los novios, que suman 13 años de relación, durmieron en la noche de ayer en el refugió e iniciaron la escalada a primera hora de hoy. Pasarán la noche de bodas en el refugio, antes de regresar a Santander.

La ceremonia, presidida por dos banderas, una de Cantabria y otra de Asturias, se cerró con el tradicional beso de la pareja y los gritos de "¡vivan los novios!" por parte de los presentes, mientras sonaba una jota cántabra al son del pitu montañés y el tambor. "Mereció la pena, fue precioso", señaló el marido, ya de regreso en el refugio de Urriellu, a media tarde de hoy.