La Consejería de Educación y Universidades del Gobierno de Canarias confirmó el pasado curso escolar 2014/15 un total de 67 casos de acoso escolar a través del teléfono de atención especialmente operativo para problemas de este tipo. Según se desprende de un documento remitido por el Ejecutivo autónomo al Parlamento regional, las situaciones de acoso confirmadas se han elevado un 34% en tres años escolares, al pasar de 50 confirmados en 2012/13 a los 67 del pasado curso.
El servicio de atención telefónica se puso en marcha por la Administración educativa hace algunos años con la intención de dar información y orientación a quien recurra al número ante un posible caso de acoso escolar. Los profesionales del servicio detectan en la llamada los indicadores que puedan apuntar a que el caso es verídico y activa el protocolo de acoso escolar. Durante el pasado curso, fueron 167 las ocasiones en las que se activó este protocolo, que depende del Servicio de Inspección Educativa y que incluye trabajos con el centro educativo correspondiente, el alumnado, las familias y los docentes implicados en el conflicto.
En ese sentido, cabe destacar que cuatro de cada diez de los casos en los que se activó el protocolo se convirtieron finalmente en casos confirmados, según datos de la Consejería canaria de Educación y Universidades. En concreto, el pasado curso fueron un 43%: 67 conformaciones respecto a las 156 activaciones del protocolo.
La Administración educativa puntualiza en el documento que "se tramitan todas las denuncias recibidas a través del teléfono que se definen como acoso escolar informado". En relación a la evolución de este tipo de intervenciones, la información del Gobierno de Canarias revela un aumento del 21,15% en tres años, al pasar de 129 en 2012/13 a los 156 del pasado curso escolar.
En total, durante los últimos tres años, se han considera supuestos informados de acoso escolar un total de 436 llamadas, de las que 187 se confirmaron como casos, lo que implica seis de cada diez.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que este tipo de llamadas no se consideran como denuncia en el sentido literal, ya que "el servicio prestado se considera como procedimiento para gestionar el conflicto y por tanto iniciar la intervención de carácter educativo, responsabilizador y reparador del daño causado".
Respecto al acoso escolar, la consejera canaria de Educación y Universidades, Soledad Monzón, consideró durante una intervención reciente en Parlamento de Canarias, que la incidencia del acoso escolar en los centros públicos en los últimos tres años está "estabilizada" y espera que la "mayor sensibilización" que hay ahora sirva para que esas cifras comiencen a reducirse en los próximos cursos.
Según datos recientes de un informe de la organización Save The Children, el porcentaje promedio en España de niños y niñas que sufren acosos ocasional es del 8,1%, mientras que el porcentaje de acoso frecuente es del 1,2%. Según este baremo, Canarias se sitúa en valores algo menores de la media: 7,6% de víctimas de acoso ocasional y 0,7% de acosos frecuente.
A la cabeza
En cuanto a proporción de niños y niñas que sufren ciberacoso, la media española es de 5,8% en casos ocasionales y 1,1% en casos frecuentes. En esta ocasión, Canarias se sitúa por debajo de la media en casos ocasionales (4,9%) pero, sin embargo, se sitúa a la cabeza española, con un 1,8%.
La Consejería de Educación recoge en su web un apartado dedicado especialmente al programa de atención al acoso escolar, en el que se define esta situación como la intimidación y el maltrato entre escolares de forma repetida y mantenida en el tiempo, con la intención de humillar y someter abusivamente a una persona indefensa por parte de otra acosadora o de un grupo, a través de agresiones físicas, verbales y sociales con resultados de intimidación psicológica y rechazo grupal.
