El espectrógrafo infrarrojo EMIR del Gran Telescopio CANARIAS (GTC) tuvo su primera luz con éxito el pasado 13 de junio, obteniendo, entre otras, una imagen del cúmulo globular NGC5053. Para estas observaciones, apuntó a una estrella de guiado, centrada en el campo de visión del GTC con el fin de comprobar el alineado relativo del instrumento respecto del telescopio. "La estrella -explica Francisco Garzón, investigador principal del proyecto-, apareció prácticamente en el centro del detector de EMIR y, seguidamente, apuntamos a objetos cada vez más complejos, hasta que una media hora más tarde tomamos la imagen de NGC5053. La imagen del cúmulo se mostró nítida, aunque algo desenfocada, lo que se corrigió rápidamente", añade. Al día siguiente, también se tomaron los primeros espectros con las lámparas de calibración.