La Unión Europea se ha propuesto exprimir la economía azul, el negocio sostenible de las algas y explotar las posibilidades de los fondos marinos. En este contexto, el Archipiélago canario presenta unas condiciones privilegiadas y ha pasado de la teoría a la acción con la firma de un convenio entre el Gobierno regional, el Cabildo de Gran Canaria y la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) que el presidente insular, Antonio Morales, calificó como un hecho histórico. Este acuerdo parte de un compromiso de cooperación y colaboración interadministrativo cuyo objetivo a medio y largo plazo consiste en situar a las Islas como un referente internacional en cuanto los recursos de la biotecnología marina, a través de la investigación y las aplicaciones comerciales de los cultivos de algas como gran atractivo para las inversiones extranjeras. De esta manera nace la Plataforma de Excelencia en Biotecnología de Algas, que se conocerá por el acrónimo PEBA, y que contará los próximos cuatro años con una presupuesto inicial valorado en 11 millones de euros y que puede ampliarse mediante la entrada de inversión privada.
El futuro está en el mar. El negocio de la economía azul, basado en los recursos que ofrecen los ecosistemas naturales para la producción de bienes y servicios, mueve en todo el mundo 176 billones de euros. Este reclamo, junto al trabajo de investigación realizado durante años por el Banco Español de Algas -un servicio nacional de I+D+i que gestiona el Parque Tecnológico de la ULPGC- y la necesidad de diversificar la economía canaria ha derivado en una apuesta común que fue presentada ayer, por Antonio Morales, Pedro Ortega y José Regidor, como el primer paso en la estrategia de convertir canarias en un referente mundial.
El presidente del Cabildo confía en la entrada de capital privado tanto de las empresas insulares, como de las nacionales y, sobre todo de las extranjeras. "Estamos ante un sector de un potencial altísimo ya que este es uno de los campos de investigación en los que más se está invirtiendo en todo el mundo por lo que nos va a permitir captar fondos a través de estas propuestas", explicó. Este señaló que esta iniciativa surge del trabajo de tres instituciones "de prestigio y largo recorrido" como son el Instituto Tecnológico de Canarias (ITC), el Banco Español de Algas (BEA) y la Sociedad de Promoción Económica de Gran Canaria (SPEGC). Morales anunció que a estas tres se sumará una cuarta infraestructura: una planta de investigación en Arinaga para empresas con una inversión de 2,5 millones de euros.
El presidente insular destacó que este sector sostenible, que se basa en el estudio de las microalgas, se posiciona como una respuesta clave en la lucha contra los efectos del cambio climático, para la alimentación, la energía y, también ,para la industria cosmética y la farmacéutica. Este apuntó que la isla se encuentra en el momento apropiado para el desarrollo de esta campo de investigación puesto que Europa considera el crecimiento de la economía azul como una prioridad, por la experiencia y los conocimientos acumulados de BEA, ITC y "porque tenemos condiciones extraordinarias para desarrollar una propuesta de estas características" por biodiversidad, condiciones medioambientales, localización geográfica y ventajas fiscales. "Por todo esto, estamos en condiciones de competir con cualquier lugar del mundo que ponga en marcha una iniciativa de estas características", expuso Morales.
De esta manera los tres objetivos fundamentales que se marcan Cabildo, Gobierno y ULPGC consisten en: convertir Gran Canaria en una referencia en investigación y experimentación, impulsar el cultivo de lagas en la isla y crear industria, desarrollo empresarial en torno a la bioindustria ligada a la teconología azul.
El rector de la ULPGC, José Regidor, destacó el valor que supone la suma de recursos de los tres "actores" implicados en un esfuerzo importante de cooperación y coordinación en una isla con unas oportunidades extraordinarias que no deberíamos dejar pasar. Regidor señaló que esta alianza permitirá potenciar la investigación y el desarrollo en un campo en el que la ULPGC lleva años implicado, sino que además, "tengo la esperanza fundada de que esto permitirá el desarrollo de nuevas empresas, tejido industrial y, en resumen, una nueva economía vinculada a la biotecnología marina".
El consejero de Industria del Gobierno canario, Pedro Ortega, señaló, por su parte, que la incorporación del Ejecutivo regional responde al proposito de generar una mayor actividad empresarial y que esta, al mismo tiempo, genere empleo de alta cualificación. Además, esta iniciativa se ajusta a la estrategia de especialización RIS3 de la Unión Europea para favorecer un crecimiento inteligente de la región, y que apuesta por bajar el crecimiento sostenible en los sectores marino y marítimo. "Nosotros entendemos que gran parte del crecimiento de esta tierra tiene que estar basada en la economía azul", expuso Ortega antes de sostener que "la fusión de administraciones y entidades debe ser un núcleo tractor que haga que, sobre ella, se depositen empresas y otras actividades ligadas a nuestro mar y costas para favorecer las inversiones y que esto nos ayude a la internacionalización de Canarias. Solo nos faltaba ir todos juntos en un proyecto común".
La puesta en marcha se realizará con una plantilla de personal investigador formado por 26 especialistas entre doctores, licenciados, así como con laboratorios de biología molecular, analítica y bioquímica, óptica, microscopía y citometría, equipos de fisiología celular y plantas de cultivo.
