Canarias, con una ratio de 22,8 casos por cada 10.000 mujeres, es la comunidad con más casos de víctimas de violencia de género, muy por encima de la media nacional, que es de 13,5, al igual que en Baleares (19,5) y Murcia (18,5).
De enero a marzo de este año, 2.423 mujeres presentaron 2.416 denuncias de malos tratos en Canarias. Casi una de cada cuatro denunciantes, el 23,6%, recibió una orden de protección. El Archipiélago vuelve a estar en cabeza de esta estadística, pues en el cuarto trimestre de 2015 ocupaba también el primer lugar entre las comunidades autónomas, si bien con una ratio menor a la registrada en el primer trimestre de 2016: 19,35 casos por cada 10.000 mujeres.
Según los dos datos difundidos ayer por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), correspondientes al primer trimestre del año, la ratio más baja se dio en Aragón, con 6,4 casos por cada 10.000 mujeres, además de en La Rioja (6,9) y Galicia y Castilla y León (en torno a 8).
En cifras absolutas, en Andalucía es donde más denuncias se presentaron (7.141), seguida de Madrid (5.150), Cataluña (4.723) y la Comunidad Valenciana (4.347).
Por el contrario, en las autonomías menos pobladas es donde menos denuncias se registraron: La Rioja (166), Cantabria (325) y Navarra (364).
Respecto a las ordenes de protección, la ratio más elevada comparada con el número de mujeres víctimas de violencia machista se dio en La Rioja, con un 80%, seguida de Aragón, con el 68,7%, frente a otras comunidades como País Vasco, donde sólo el 14,9% de las víctimas solicitó alguna medida. De media, el 59% de las órdenes solicitadas fueron adoptadas, un porcentaje que llega al 87% en Baleares, al 86% en La Rioja y al 82% en Extremadura.
En el lado opuesto, en Cataluña se admitieron el 39% de las solicitudes de protección, en Madrid el 44% y en el País Vasco el 46%.
Policía
El director general de la Policía, Ignacio Cosidó, aseguró ayer que la lucha contra la violencia de género se ha convertido en uno de los retos prioritarios y a la vez más difíciles de la Policía, porque es un problema que persiste y que no disminuye, como otros delitos.
El director general de la Policía Nacional, inauguró el V Curso Internacional de la Policía Nacional que con el título Violencia contra la mujer: una visión multidisciplinar se celebra en el Monasterio de San Zoilo de Carrión de los Condes, con la presencia de especialistas de España, Colombia, Turquía, Austria y Polonia para reflexionar sobre "uno de los retos más difíciles que tiene planteada la Policía, que es la amenaza de la violencia contra la mujer", aseguró Cosidó.
El director general ha explicado que mientras otros delitos violentos y los homicidios disminuyen en España, el número de mujeres que muere a manos de sus parejas se mantiene, y esta "violencia se ha convertido en un problema que persiste".
Ha reconocido que es bueno que aumente "levemente" el número de denuncias porque eso significa que hay más confianza en las Fuerzas de Seguridad, pero ha insistido en que el hecho de que se mantengan los datos de asesinatos "obliga a reflexionar y a actuar de manera muy determinante".
Por eso ha dicho que la violencia machista es una prioridad estratégica de la Policía y uno de sus principales retos y también de los más difíciles, porque es una violencia que se produce en el ámbito íntimo de la familia donde la actuación de la Policía es "especialmente delicada".
Ha destacado la creación de las Unidades Familia y Mujer en todas las Comisarías de España como una de las herramientas fundamentales dentro de esta estrategia para poder dar un trato especializado a las víctimas y una respuesta integral.
Al respecto ha avanzado que a pesar de la escasez de recursos la Policía quiere potenciar estas unidades en el ámbito de la investigación, "donde queremos hacer un esfuerzo especial".
