Juno ha alcanzado la órbita de Júpiter. Los secretos del planeta por excelencia, el más grande del sistema solar, están cada vez más cerca de ser descubiertos. La nave espacial ayudará a dar un salto cuantitativo y cualitativo sobre la información que se tiene en estos momentos sobre la creación del sistema solar y de cómo se forman los planetas gigantes. Su viaje ha sido muy largo -se ha prolongado durante cinco años- ya que el planeta se encuentra a casi mil millones de kilómetros de la Tierra.

La sonda enviada por la NASA, cuyos investigadores celebraron como un gran éxito su aproximación el pasado martes, permitirá confeccionar un mapa de su campo magnético, medir la cantidad de agua y amoniaco de su atmósfera y observar sus auroras boreales. Julia de León, investigadora del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), señaló ayer que Júpiter "es la clave" para conocer el inicio de nuestro sistema solar. "También se conocerá mucha más información de la que tenemos ahora sobre su órbita y sus asteroides", añadió la experta en astrofísica. Europa, una de sus lunas, es en estos momentos una de las apuestas de la NASA en lo que a búsqueda de vida fuera de la Tierra se refiere. La presencia de agua congelada hace presagiar que se trata de un buen lugar para hallar algún tipo de vida.

Juno dará un total de 37 vueltas alrededor de Júpiter durante los próximos 20 meses. Los investigadores deben tener paciencia hasta que se comiencen a recibir las primeras informaciones de la sonda. Las dos primeras órbitas en torno al plantea tendrán una duración de 53,5 días.

Pruebas

Durante esta primera fase se probará todo el instrumental que lleva incorporado la nave y que se utilizará con posterioridad para realizar la recogida de datos durante cerca de año y medio. Será el 14 de octubre cuando se ponga en marcha una fase de cinco días para desarrollar órbitas que se prolongarán 14 días, algo más cortas. Será a partir de ese momento cuando se ponga a trabajar la maquinaria y de donde se obtenga la mayor parte de los datos que serán analizados con posterioridad.

"Ahora mismo casi todo lo que sabemos de Júpiter lo sabemos porque se ha estudiado desde la Tierra. Esto abre una gran posibilidad para avanzar", concretó la experta del IAC. Aunque desde Canarias no se colabora de forma directa en este envío, sí que los datos "nos van a afectar mucho", añadió Julia de León. "Podrán emplearse para conocer la influencia del planeta en la evolución del sistema solar y, sobre todo, para saber que esconden muchos exoplanetas, los que están fuera de nuestra sistema solar y que giran alrededor de otras estrellas y que, como Júpiter, son gigantes", subrayó De León.

La anterior sonda que pudo entrar en la órbita de Júpiter (otras nueve pasaron de largo) fue la que se puso en marcha con la misión espacial Galileo. Su viaje comenzó en octubre de 1989 y no penetró en la atmósfera del plantea hasta diciembre de 1995. Pudo adentrarse unos 200 kilómetros hasta que fue destruida por las altas presiones y temperaturas. Le dio tiempo de transmitir datos sobre su composición química y la actividad meteorológica de Júpiter. Ahora Juno busca ampliar los conocimientos sobre su "elevado campo magnético", según detalló la investigadora del IAC.

La sonda va a estar muy cerca de la superficie del planeta, lo que permitirá conocer casi de primera mano las distintas capas de las que está formado. Además, sus instrumentos, al poder determinar la cantidad de agua de su atmósfera, servirán para establecer cuál de todas las hipótesis que se plantean sobre su formación es la válida. Descubrir si el centro del planeta está formado por elementos pesados como se supone que ocurre en el resto de planetas gigantes será otro de los avances que se espera conseguir gracias a esta sonda.

Juno es la primera nave espacial que se aproxima al planeta gigante con una batería alimentada solo con paneles solares, algo poco habitual dada su lejanía del sol. Las misiones que se ponen en marcha a tanta distancia de la Tierra suelen portar generadores eléctricos que no dependen de esta estrella pero cuyo coste es mucho más elevado.