El Sindicato de Enfermería Satse denunció ayer que este verano cerrarán más de 11.000 camas hospitalarias, 200 en Canarias, como consecuencia de los recortes estivales que supondrán, además, menos servicios y profesionales para atender a los ciudadanos.

En un comunicado, Satse ha advierte de de que este cierre de camas supondrá un aumento de las listas de espera médicas y quirúrgicas, altas precipitadas y amontonamiento de los pacientes en las salas de Urgencias, lo que obligará a los profesionales sanitarios a atender a los pacientes en lugares no habilitados para ello, como los pasillos.

Supondrá también que algunos enfermos sean desplazados a otras partes de los hospitales distintas a las unidades correspondientes a sus patologías y que, por lo tanto, no sean atendidos por profesionales especializados.

Según los datos de Satse, en Andalucía se prevé el cierre de 2.600 camas; 1.700 en Madrid; en Galicia 1.200; 1.000 en Euskadi y la Comunidad Valenciana; 800 en Castilla y León; más de 600 en Cataluña; cerca de 400 en Castilla La Mancha y Aragón; casi 400 en Asturias; 200 en Extremadura, Canarias y Murcia, en Navarra son más de 130; en Cantabria 65 y en la Rioja son cerca de 50.