Desde el mes de junio 18 personas han sido ingresadas en un hospital canario como consecuencia de un golpe de calor, según datos ofrecidos por la Dirección General de Salud Pública. La mayoría de los afectados son personas de más de 60 años, pero entre ellos también se encuentran varios de mediana edad, adolescentes y niños.

Eduardo García - Ramos Alonso, médico del Servicio de Epidemiología y Prevención de la Dirección General de Salud Pública, explicó ayer que estas personas fueron trasladadas a un centro hospitalario tras mostrar síntomas de exposición al calor. Algunos de ellos fueron atendidos tras la realización de alguna actividad, como caminatas por senderos forestales, pero otros fueron trasladados en plena calle. En general, el ingreso es de sólo unas pocas horas, salvo que se haya provocado algún colapso orgánico.

Cada año la Dirección General de Salud Pública supervisa las alteraciones por el calor con una campaña específica desde el 1 de junio al 15 de septiembre. Este departamento de la Consejería de Sanidad es el encargado de activar la alerta sanitaria por calor que afecta sobremanera a varios municipios grancanarios.

La alerta meteorológica viene dada por la temperatura de una región en un día determinado, y la alerta sanitaria conjuga las altas temperaturas con los días de duración. En concreto, para decretar en Canarias una alerta sanitaria las temperaturas deben superar los 32º de máxima y los 24º de mínima, que normalmente es la nocturna.

"Mientras más tiempo duren las altas temperaturas, más riesgo hay de que se produzcan problemas de salud", indicó ayer Eduardo García - Ramos. El médico explicó que la alerta amarilla es porque este calor dura uno o dos días; la alerta naranja, tres o cuatro días; y la roja, más de cinco días. "Por mucho calor que haga durante el día si por la noche refresca, nuestro organismo se recupera mejor. Sin embargo, si hace mucho calor por la noche, sobre todo, las personas que regulan mal el calor, como es el caso de enfermos crónicos o niños, pueden sufrir más las consecuencias", añadió el especialista.

Hasta hace poco la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias se basaba en las previsiones meteorológicas a nivel provincial, en cambio, ahora se tiene en cuenta la temperatura de los municipios. Por este motivo está decretada la alerta en zonas muy específicas.

En concreto, está activada la alerta sanitaria nivel naranja en los municipios de Agaete, Agüimes, Gáldar, Ingenio, y San Bartolomé de Tirajana porque se superarán las temperaturas umbrales durante tres días consecutivos.

Además, estarán en alerta sanitaria de nivel amarillo en Artenara, Mogán, Tejeda, Santa Lucía, Valleseco, Valsequillo y Vega de San Mateo (Gran Canaria); Betancuria y Pájara (Fuerteventura); Adeje, Arico, Arona, Buenavista, Granadilla, Guía de Isora, Güimar, Puerto de la Cruz, San Miguel de Abona, Santiago del Teide y Vilaflor (Tenerife) por estar prevista la superación de las temperaturas umbral durante dos días consecutivos (hoy y mañana).

Por otra parte, estará activada en Santa Cruz de la Palma, Breña Alta, Breña Baja, Fuencaliente, Garafía, Los Llanos El Paso, Puntallana, Puntagorda, San Andrés y Sauces, Tazacorte, Tijarafe y Villa de Mazo (La Palma), únicamente mañana.

Precisamente, al hacer las previsiones meteorológicas por municipio, se prevé que, a partir de ahora se activen más alertas sanitarias en el Archipiélago. Esta es la segunda decretada por Sanidad desde que comenzó el año. La primera fue hace dos semanas en prácticamente los mismos municipios que se encuentran actualmente en alerta naranja, pero entonces fue amarilla.

"Urgencia médica"

García - Ramos subrayó que, como consecuencia de las altas temperaturas durante varios días, el calor se va acumulando en el organismo, el sistema de eliminación del calor resulta insuficiente en algunas personas y aparecen las consecuencias, que fundamentalmente es el golpe de calor. "Es el tema más grave y se trata de una urgencia médica", apuntó.

Normalmente los primeros síntomas suelen ser mareos, sudoración profusa o dolor de cabeza. "Son síntomas iniciales que si nos paramos, nos ponemos a la sombra y nos refrescamos, normalmente nos recuperamos. En el caso de no recuperarse, hay que llamar al 112 para que un médico valore si es necesario dar hidratación intravenosa", aclaró el especialista. En el caso de que estos primeros síntomas no se traten adecuadamente y la persona siga acumulando calor, puede aparecer fiebre de 39º o 40º grados, y si no se hidrata, se puede perder el conocimiento y entrar en shock. "El golpe de calor es una urgencia que debe ser tratado desde el punto de vista sanitario", insistió García - Ramos.