Los pacientes que reciban el alta hospitalaria a partir de ahora se llevarán el plan de tratamiento impreso sin necesidad de acudir a su médico de cabecera para que recete lo prescrito previamente por el especialista. Esta es una de las principales ventajas de la receta electrónica que, tras varias fases, acaba de finalizar su implantación en las áreas de hospitalización de todos los centros públicos canarios.
La receta electrónica incorpora y detalla el tratamiento a seguir por el paciente tras el alta, por lo que después de abandonar el hospital lo único que debe hacer es acudir a una farmacia para adquirir los medicamentos prescritos por el especialista.
"Hasta ahora el usuario se iba del hospital con un alta y tenía que acudir a su médico de familia para que le hiciera la receta con los nuevos tratamientos de manera continuada o provisional. Sin embargo, ahora el paciente se va a casa con la nueva receta, que sustituye a la anterior y que recoge cualquier cambio que se haya producido", explica Bernardo Macías, director general de Programas Asistenciales de la Consejería de Sanidad.
Este sistema, que ya estaba funcionando en las consultas de Atención Primaria y Hospitalaria, tiene como objetivo mejorar la seguridad y calidad de la prescripción, y proporcionar al paciente un plan terapéutico único y actualizado. "Las principales ventajas son la comodidad y seguridad para el paciente porque ya no debe trasladarse al centro de salud y porque en la receta se incluye toda la información necesaria", apunta Macías.
Asimismo, el director de Programas Asistenciales aclara que actualmente todas las comunidades autónomas españolas están trabajando en la implantación de la receta electrónica, pero Canarias es una de las regiones pioneras y en las que más se ha avanzado hasta el momento.
"Desde el principio la comunidad canaria ha creído en este sistema porque tiene muchísimas ventajas, tanto para el paciente como para el médico", detalla Macías que explica que también proporciona una interoperatividad, es decir, que los canarios puedan ir a cualquier parte de España y retirar sus fármacos. A día de hoy esta fórmula sólo funciona con Extremadura, pero se está ampliando a otras comunidades.
