Unos 1.550 pacientes ingresan anualmente en los hospitales canarios por problemas de corazón. Así lo aseguró ayer el presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Las Palmas, Juan Ramón Ayala, tras las firma de un acuerdo de colaboración con la Asociación Canaria de Pacientes Cardiacos y Coronarios Canarios con corazón.

Dicho convenio tiene como objetivo que las farmacias de las Islas informen a los clientes con enfermedades coronarias de las ventajas de pertenecer a dicha asociación, que es totalmente gratuita, así como favorecer todas las actuaciones de hábitos saludables preventiva para este tipo de enfermedad.

Ayala, que acudió acompañado del presidente de la Asociación, Ricardo Curto Núñez, y del vicepresidente, Francisco Martín Pérez, añadió que Canarias está en el tercer puesto en España por cardiopatías y que ocupan el 22,85 de las defunciones que se producen en las Islas. "La media en las mujeres se está incrementando, llegando a un 24 %", señaló. "Y puede estar relacionado con el estrés al que están sometidas actualmente", dijo.

Ricardo Curto afirmó que Canarias es la tercera comunidad en España con ingresos por problemas de corazón, y una de la que más riesgo tiene en Europa. "En las islas", aclaró "no son por enfermedades como hipertensiones, sino tiene más que ver con hábitos de civilizaciones avanzadas como sedentarismo, mala alimentación o llevar una vida desordenada", añadió. Para Curto, este convenio es un paso adelante ya que la farmacología es importante para el tratamiento. "Juntos podemos hacer frente a campañas para que el pueblo lo asuma correctamente. El Colegio de Farmacéutico es un puente con la sociedad".

Recordó que "el corazón no es reemplazable, no es una máquina, sino un músculo pero traicionero, porque los demás cuando se cansan avisa, con agujetas, pero en este no avisa, sino se para".

El presidente de la asociación denunció que la comunidad canaria no se caracteriza por invertir en recursos socio-sanitarios. "Esto sucede desde hace muchos años", señaló. "Pero nosotros pedimos el tratamiento digno de cualquier persona". Por eso, reclamó medidas como la colocación de desfibriladores en las dos playas capitalinas "que salvarían muchas vidas" ya que existe un desfibrilador, al aire libre, con mecanismo antivandálico, que podía haber salvados muchas vidas este verano".

Curto recordó que "el infarto cogido a tiempo nunca es mortal", y una intervención rápida puede salvar del noventa al noventa y ocho por ciento de vidas humanas. "Y esto pasa por la utilización de desfibriladores y saber utilizarlo". El experto también subrayó que la mejor prevención es una alimentación equilibrada algo de ejercicio y evitar consumir alcohol y tabaco.