La incorporación de la figura del educador social en la futura Ley de Servicios Sociales promovida por el Gobierno de Canarias, aún en borrador, ha sido el eje central de las segundas Jornadas de Educacion Social y Profesión, que organiza el Colegio Profesional de Educadoras y Educadores Sociales de Canarias (Ceescan).

El campus de Humanidades de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) fue escenario ayer de dos mesas de debate, que gravitaron alrededor de la importancia de la educación social en materia de servicios sociales y de la apuesta por herramientas que implementen una mirada socioeducativa en la futura ley, cuyo borrador del anteproyecto fue presentado el pasado mes de julio.

"Desde el Ceescan hemos presentado una serie de alegaciones a la Ley de Servicios Sociales porque carecía de un aspecto muy importante para nosotros, que es el trabajo socioeducativo y participativo que debemos abordar con los ciudadanos", expuso ayer el presidente del Ceescan, Francisco Rodríguez Reyes. "Nosotros entendemos que la educación social es un derecho de los ciudadanos y que esta es una profesión que ayuda a la transformación de la sociedad con procesos de acompañamiento, integración y participación en la vida social", explica, "por tanto, no puede quedar al margen de una ley de servicios sociales".

La primera mesa de debate contó ayer con la asistencia de varios diputados del Parlamento de Canarias, así como de Isabel Mena, viceconsejera de Servicios Sociales, con el fin de "contrastar nuestra visión como educadores sociales con la visión de los políticos sobre el futuro de esta ley", indica Rodríguez. "Nuestro objetivo es que en esta ley, que pronto se presentará en el Parlamento, podamos ir reconociéndonos los educadores y las educadoras sociales, así como los instrumentos y herramientas que nosotros disponemos en el trabajo con la infancia, los mayores y los discapacitados", concluye.