El Rey ha entregado este sábado a la comarca de Los Oscos, acompañado de doña Letizia, el Premio al Pueblo Ejemplar de Asturias para reconocer los esfuerzos de tres municipios que afrontan su futuro "con un mensaje de unión" y "caminan juntos con la solidaridad y el entendimiento como norma".

Así se ha expresado Felipe VI durante la ceremonia de entrega, al término de una visita a los tres concejos de Los Oscos -San Martín, Villanueva y Santa Eulalia- marcada a ratos por la lluvia y en la que ha acompañado a los Reyes el presidente asturiano, Javier Fernández, quien este domingo afrontará en Madrid un decisivo Comité Federal del PSOE como máximo responsable de su Comisión Gestora.

"En esta comarca hermosa que habéis sabido proteger y conservar, comprobamos otra vez que el esfuerzo y el sacrificio siempre dan los frutos más valiosos", ha subrayado el Monarca al elogiar a la población de Los Oscos por su "sentido arraigado de la solidaridad vecinal" y por saber hacer de sus montañas "puertas más que fronteras, para que unan y no separen".

"Habéis elegido seguir construyendo el futuro sin abandonar el pasado; ese es el valor ejemplar que también reconocemos hoy", ha señalado asimismo don Felipe, antes de valorar que la comarca "se ha conservado fiel a sí misma", con una dignidad transmitida a los jóvenes, que "ya no se sienten al margen y afrontan el futuro con más optimismo".

La inmensa mayoría de vecinos de los tres municipios, cuya población conjunta ronda las 1.400 personas, han seguido desde calles, ventanas y balcones engalanados con banderas de Asturias y España la visita de los Reyes a esta comarca montañosa limítrofe con Galicia, a la que sus yacimientos de hierro dotaron de una fuerte personalidad histórica propia a partir de la Edad Media.

Tras el declive económico y la despoblación sufrida a lo largo del siglo XX, ha contribuido en las últimas décadas a su despegue el asociacionismo y el auge del turismo, favorecido con la Reserva de la Biosfera Oscos-Eo declarada por la Unesco en 2007, que ha impulsado la recuperación de abundante patrimonio cultural y la rehabilitación de casas para su uso como alojamientos rurales.

Las primeras gotas de lluvia han coincidido con la llegada a San Martín de Javier Fernández, muy serio y pensativo durante todo el recorrido, quien ha aguardado la llegada de don Felipe y doña Letizia junto al ministro Íñigo Méndez de Vigo en la plaza de las Infantas, donde los Reyes han recibido los primeros aplausos y vítores, que no ha dejado de acompañarles en todo el recorrido.

Después de conversar con un grupo de escolares sobre sus dibujos, expuestos en la parroquia y de que una de las niñas obsequiara a la Reina con un ramo de flores, los Reyes han contemplado una demostración de dos actividades tradicionales de la zona: el "malle del trigo" para separar el grano y el "teitado" o reposición de la techumbre de un hórreo con la paja sobrante del proceso anterior.

En Villanueva, han comprobado los trabajos de rehabilitación del conjunto monástico medieval de Santa María, un Bien de Interés Cultural que fue durante siglos centro organizativo del espacio económico de esta zona de Asturias, y han escuchado la muñeira que un grupo de gaitas ha interpretado en homenaje a un músico local que fue esencial para recuperar las tradiciones de la comarca.

La música de gaitas ha acompañado a los Reyes en distintos puntos del recorrido, mientras saludaban a vecinos de todas las edades, y también les esperaba en Santa Eulalia, donde se han detenido a conversar con seis veteranas hilanderas, que han mostrado a la Reina el manejo del huso y la rueca y la han obsequiado con un pañuelo de seda, al tiempo que regalaban al Rey un par de calcetines.

Las labores de forja propias del apogeo económico de Los Oscos -donde llegó a haber más de un centenar de fraguas- han sido asimismo recreadas ante los Reyes por los herreros autores de las figuras que decoran los monolitos conmemorativos del Premio al Pueblo Ejemplar inaugurados hoy por ellos en los tres municipios.

A la ceremonia de entrega en Santa Eulalia -pueblo natal del marqués de Sargadelos-, con un cielo ya más despejado que permitía disfrutar de un espectacular paisaje de montaña tras el escenario, ha seguido una alfombra floral con el escudo de la Fundación Princesa de Asturias y un mercado de artesanía y productos autóctonos.

Allí, antes del almuerzo con el que han puesto fin a su visita de tres días a Asturias, un pintor ha conseguido que don Felipe y doña Letizia posaran, divertidos, con las caras juntas detrás de un marco vacío en el que se podía leer: "Yo estuve en Los Oscos".