La Provincia - Diario de Las Palmas

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Día Internacional de la Eliminación de la Violencia Contra las Mujeres

44 fallecidas en Canarias en la última década

Las mayoría de los malos tratos denunciados son cometidos por exparejas de las agredidas

Un total de 44 mujeres han fallecido por violencia machista en la última década en Canarias. Entre 2006 y 2015 murieron 38 por esta causa, según los datos que recoge el Instituto Canario de Estadística, a las que hay que añadir las seis víctimas mortales que se han registrado en lo que va de año. La serie de datos muestra un preocupante retroceso y hace de 2016 la peor anualidad en este capítulo desde 2010. Ese año los malos tratos se cobraron la vida de siete mujeres, una dramática marca que no se ha repetido, pues desde entonces los guarismos fueron muy inferiores: en 2014 se registró una muerte y en 2015 tres. Hoy se celebra el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres.

En todo caso, el índice de fallecimientos puede arrojar un cuadro engañoso con respecto a la realidad de la violencia, pues hay que ponerlo en relación con otros datos que también dan cuenta de la mayor o menor incrustación de este problema en la sociedad canaria. Así, media de llamadas diarias recibidas en el Servicio de Atención a Mujeres Víctimas de Violencia se mantuvo muy estable entre 2009 y 2015. Si en el primer año este servicio telefónico recibía unas 37,8 denuncias diarias, la anualidad pasada la estadística estuvo en 37,7.

En este panorama hay que tener en cuenta el crecimiento de los comportamientos de violencia de género entre los menores, algo de lo que alertó el Gobierno canario esta misma semana y que supone un toque de atención para las administraciones comprometidas en las políticas educacionales. De las 11.263 personas atendidas el pasado año en Canarias por los recursos de ayuda a víctimas de la violencia, 8,684 era mujeres y 1.585 eran menores expuestos a la violencia.

En consonancia con la media de llamadas diarias recibidas por los servicios telefónicos, la serie estadística correspondiente a las denuncias por violencia de género muestra un leve descenso entre 2010 y 2015, descenso centrado además en la provincia de Las Palmas. Si en 2010 se recibieron 4.729 denuncias, el año pasado habían descendido hasta 3.994. Sin embargo, en la provincia de Santa Cruz de Tenerife las denuncias crecieron en el mismo tramo desde las 3.597 registradas en 2010 a las 3.764 que se censaron cinco años después. Datos que, cruzados, certifican una situación de cierta estabilidad, sin que se agrave o mejore la situación de manera sensible.

En Canarias la violencia de género la ejercen preferentemente las exparejas, una situación que se ha mantenido esencialmente estable desde 2010. El año pasado se recibieron 988 denuncias que señalaban a una exrelación afectiva como el agresor. Otras 621 emplazaban la agresión en una relación afectiva actual, mientras que las denuncias a cónyuges fueron 399, por 233 las a excónyuges.

En cuanto al perfil de la mujer agredida, si nos centramos en las 38 féminas que murieron por violencia machista en las Islas entre 2006 y 2015, obtenemos que 23 eran españoles, por nueve comunitarias, cuatro latinoamericanas y dos pertenecientes a otros territorios.

En este estado de cosas, el Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, con sede en el Consejo General del Poder Judicial, pedía ayer pasar del objetivo de tolerancia cero al objetivo de "víctimas cero", en la Declaración institucional que ha hecho pública con motivo del Día Internacional contra la Violencia de Género que se celebra este viernes 25 de noviembre.

"Porque aspiramos, por utópico que pueda sonar, a que no haya ni una sola mujer asesinada, lesionada o damnificada más, a que pasemos de la tolerancia cero al objetivo de víctimas cero", reza la declaración.

Rechazo unánime

Además, el Observatorio invita a la sociedad a rechazar de forma unánime cualquier expresión, por mínima que parezca, de "resistencia hacia la igualdad de género", a combatir activamente "la discriminación, la crueldad y el ensañamiento" contra las mujeres, así como a "aislar al maltratador" y condenar a todos los que ejercen esta violencia.

"La violencia que se dirige sobre las mujeres, por el hecho mismo de serlo, por ser consideradas por sus agresores como personas carentes de los derechos mínimos de libertad, respeto y capacidad de decisión, constituye uno de los ataques más flagrantes a los derechos humanos fundamentales", subraya.

Según advierte el Observatorio, la violencia de género se fundamenta en una situación desigualitaria de "dominación" por parte del hombre, que priva a la mujer de su plena libertad y la subordinación de la mujer se realiza, entre otros mecanismos, a través de la violencia machista, "que hoy en día es un elemento estructural de la sociedad".

Sobre las consecuencias de la violencia de género, el Observatorio cita a ONU Mujeres, que denuncia las múltiples consecuencias sanitarias, físicas, sexuales, psicológicas, e incluso mortales, para mujeres y niñas.

Por su parte, la delegada del Gobierno para la Violencia de Género, Blanca Hernández, destacaba ayer que España es un país en el que se ha trabajado "mucho y bien" en materia de violencia de género, y ha dicho que uno de los retos actuales es "prevenir para que los más jóvenes vivan en una igualdad real".

En declaraciones recogidas por Efe, Hernández, que presidió en Ciudad Real el acto organizado por la Confederación de Federaciones y Asociaciones de Familias y Mujeres del Medio Rural (Afammer) con motivo del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, destacaba que los más jóvenes deben aprender a reconocer las señales de maltrato.

En este sentido, advirtió a los alumnos de varios centros que han acudido al acto que actitudes como controlar las contraseñas del móvil y del ordenador, impedir que salgan con amigas, controlar cómo visten, pedir una foto como muestra de amor y que esa foto acabe subida en las redes sociales, la humillación, las faltas de respeto, los celos o los insultos "no son señales de amor sino de maltrato". Asimismo, recordó que miles de mujeres son a diario víctimas en el mundo de las distintas formas de violencia: agresiones psicológicas y físicas.

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