"Los últimos casos de acoso escolar, con palizas a varios estudiantes, son solo el reflejo de lo que está pasando en España", asegura Óscar Cortijo, quien añadió que "estamos en una época de eclosión de casos, que es el fruto de no haber hecho los deberes para que los centros escolares no se conviertan un campo de batalla". El experto explicó que "el acoso es un proceso reiterado de conductas violentas, psicológicas y físicas, con secuelas graves", y que el sistema falla continuamente por no tenerlo en cuenta.

Cortijo agregó que "si examinamos casos como los de Mallorca op Alicante vemos que no se ha sensibilizado, ni formado, a las familias en el problema del acoso. Ha fallado la formación de los profesores para saber cómo intervenir ante este problema de forma rigurosa. Y, lo más importante, no se está evaluando qué es lo que sucede en las aulas, y lo que no se mide no se puede gestionar".

Es más, el director corporativo de Personas de CEU España aseveró que "se está instaurando el mensaje de que todo vale. Y lo que se está propiciando es que, al final, la actitud de los acosadores acabe perpetuándose en la edad adulta con violencia doméstica y acoso laboral". Así las cosas, el coautor del manual editado por el CEU contra el acoso afirmó que "estamos dando palos de ciego, en lugar de utilizar sistemas que nos pueden ayudar a controlar el problema".