La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Letras

Lorenzano: "Me interesa la palabra literaria como diálogo con el otro"

La escritora argentina inauguró ayer el ciclo 'Arte, Literatura y Violencia en Latinoamérica' en la Casa de Colón

La escritora y Doctora en Letras por la UNAM Sandra Lorenzano, ayer, en la Casa de Colón. SABRINA CEBALLOS

La palabra literaria como diálogo y elemento de transformación social en el terreno de los valores de la otredad, la ética y la solidaridad es la línea de investigación que traza la aclamada escritora argentina Sandra Lorenzano, Doctora en Letras por la Universidad Nacional Autónoma de México. "Me parece que gran parte de lo que somos como seres humanos está en las palabras, por lo que es a través de las palabras como podemos transmitir esta eticidad que debería ser fundadora de la sociedad", apuntó ayer la escritora, especialista en arte y literatura latinoamericanos, en la Casa de Colón.

"Este sentimiento ético fundacional es lo que nos permite reconocer al otro; hacernos y ser responsables del otro, porque las palabras nos permiten conocer la realidad y, en ese conocer la realidad, está implícito el otro siempre".Así lo manifestó ayer la autora en su disertación Memorias heridas: por una ética de la palabra, en la que desgranó algunas experiencias vinculadas a la literatura en situaciones de conflicto y de violencia en México, Colombia y Argentina, que aterrizan en una defensa de la educación y la palabra como espacios de transformación social.

Lo hizo al abrigo del curso Arte, literatura y violencia en Latinoamérica, que coordina la poeta y catedrática de Literatura Hispanoamericana de la ULPGC Alicia Llarena, y que se desarrollará hasta el próximo viernes entre la Casa de Colón y la Facultad de Filología de la ULPGC. Siete expertos y expertas internacionales en el campo de las letras y la literatura, pero también de otras manifestaciones artísticas, analizarán en el marco de este itneresante ciclo la representación cultural de la compleja realidad de América Latina en las últimas décadas a través de las artes.

Desde el terreno de las letras, Lorenzano apunta que "a veces, pareciera que la palabra se agota en el circuito que va del escritor al texto y regresa y en el que, luego, está el lector como receptor; pero a mí me interesa la palabra literaria en tanto posibilidad de establecer un diálogo con el otro, porque, en este sentido, siempre es una palabra que tiene que ver con la ética". A este respecto, la escritora destaca que "el lenguaje siempre es ideológico, porque el lenguaje es una construcción cultural y, por tanto, ideológica, nunca es inocente".

"Las discusiones en torno a las palabras nunca son banales, porque esas palabras encierran toda una concepción del mundo y toda una postura frente a la cultura". Y en este sentido, "el lenguaje tiene que ver con algunas experiencias vinculadas a la violencia y de cómo a través de las palabras podemos hacerle frente a esta violencia y, con ellas, ayudar a cerrar las heridas que la violencia provoca".

Lorenzano señala que vivimos un momento de la Historia "donde el otro, a pesar de todos los siglos que han pasado desde que somos conscientes de los derechos humanos, sigue siendo invisibilizado, rechazado y excluido", como pone de manifiesto la cantidad de inmigrantes tocando a las puertas de Europa, o los migrantes latianoamericanos llamando a las puertas de México en la frontera sur, o los migrantes mexicanos tocando a las puertas de Estados Unidos en la frontera norte.

"Ahora, un personaje como Trump gana las elecciones y anuncia que va a construir un muro, pero ese muro ya existía como algo real y simbólico, que refleja la imposibilidad de pasar fronteras y de ser recibido en un país que no es el de nacimiento. Y esta también es la falta de eticidad a través de las palabras", expone. "Por eso, me gusta la palabra que usa el filósofo francés Emmanuel Lévinas: la hospitalidad, que es justo lo contrario de lo que estamos viviendo".

Así, la autora defiende que "el lenguaje literario nos sirve para recuperar estos valores, que son valores siempre en relación con un otro, que requieren a dos personas, lo cual no es muy frecuente en la literatura". Y en este sentido, Lorenzano no hace distinción entre escritores y no escritores, porque "la lectura y la escritura nos pertenecen a todos". No creo en iluminados o dueños de la palabra literaria: al contrario, está en todos los seres humanos", concluye. "Unos eligen desarrollarla y otros no, pero la palabra está al alcance de todos".

Compartir el artículo

stats