El papa Francisco afirmó ayer que es necesario "adoptar medidas para la protección y la defensa, así como la integración de los inmigrantes menores de edad", en un mensaje tras el habitual rezo del Ángelus del domingo.

Asomado a la ventana del palacio pontificio, Francisco recordó que la Iglesia católica celebró ayer la Jornada Mundial del Inmigrante y el Refugiado y que este año está dedicado a los "menores inmigrantes, vulnerables y sin voz".

"Estos pequeños hermanos no acompañados están expuestos a tantos peligros. ¡Y son muchos!", exclamó. A la plaza de San Pedro acudieron ayer para esta ocasión varias representaciones de inmigrantes y el papa les pidió que "respeten leyes y tradiciones" y deseó que puedan "vivir serenamente, conservando los valores de vuestras culturas de origen".

"El encuentro entre varias culturas es siempre un enriquecimiento para todos", defendió Francisco .También agradeció a "todos los que trabajan con los inmigrantes para acogerlos y acompañaros en sus dificultades". El pasado 13 de octubre, el Vaticano publicó el mensaje del papa dedicado a los "menores inmigrantes, vulnerables y sin voz" en el que criticaba que en vez de favorecer su integración se busque sólo impedir su entrada en los países o se favorezca su repatriación. Esta jornada se celebra en un momento en el que las asociaciones humanitarias denuncian la desaparición de 10.000 menores inmigrantes tras su llegada a Europa.