El magma del volcán de El Hierro recorrió más de 20 kilómetros por el subsuelo de la Isla en los meses previos a la erupción, retenido por zonas especialmente duras, hasta que encontró una vía para emerger bajo la superficie del mar de Las Calmas el 10 de octubre de 2011.

Un equipo del Instituto de Ciencias de la Tierra Jaume Almera (CSIC), el Instituto Geográfico Nacional (IGN) y la Universidad de Upsala (Suecia) ha publicado en la revista Scientific reports, del grupo Nature, un trabajo que muestra en tres dimensiones cómo se movió bajo la superficie el magma que formó el volcán Tagoro.

El primer firmante del artículo, Joan Martí, que vivió en El Hierro muchas de las fases de la erupción, recuerda que uno de los aspectos que más llamó la atención a los científicos que trabajaban en aquellas fechas en la Isla fue que "el magma recorrió decenas de kilómetros a profundidades de entre 15 y 20 kilómetros antes de salir".

"Gracias al nuevo modelo 3-D y a la resolución obtenida hemos podido identificar los obstáculos que condicionaron la trayectoria del magma bajo tierra hasta que éste encontró una vía factible de ascenso y salida al exterior", apunta este vulcanólogo del CSIC.

El estudio realizado por este equipo de científicos ha podido identificar "las zonas del subsuelo de la Isla más duras que obligaron al magma a desviarse de su camino, pertenecientes algunas de ellas a erupciones anteriores, como la del Tanganasoga".

La imagen 3D que se ha obtenido sobre el recorrido del magma en aquellos días muestra la existencia de "otras discontinuidades, como fallas o contactos entre rocas diferentes, que provocaron el movimiento lateral del magma en una dirección determinada".

Según Joan Martí, "el modelo ha revelado aspectos muy interesantes e importantes" de la estructura interna de la más joven de las islas de Canarias, "que no es sencilla". Para elaborar este modelo, los investigadores han empleado la tomografía sísmica, una técnica que permite obtener imágenes del interior de cuerpos sólidos interpretando cómo las ondas sísmicas atraviesan los diferentes materiales.