¿Cómo surgió la idea de juntar en un libro sus poemas con los cuadros de Comas Quesada?
El origen fue estando Comas vivo. Un día me lo presentaron, fue cuando yo ya había publicado la novela Parálisis, y le dijeron que yo escribía. Él me comentó que si yo era capaz de escribir poemas de su obras. Me dio unas diapositivas de los cuadros y yo le escribí esos textos. A él le encantaron. Todo ocurrió estando yo destinado en Gando en el año 79. Sin embargo, ese proyecto murió, aunque ahora ha renacido estando yo en Madrid, porque hablé con los hijos de Comas para retomar dicho proyecto. Ellos me mandaron reproducciones de todos los cuadros que yo había versificado entonces porque así les podía dar un toquecillo.
¿Por qué no se publicó finalmente el libro en ese año?
Porque aquella editorial de Barcelona quebró. Y poco después, en 1980 yo me vine a la Península y fuimos perdiendo el contacto Comas y yo, y los poemas se quedaron ahí dormidos. Luego, a partir de que me fui jubilando, fui sacando otras cosas. Y un día, un amigo que estaba metido en la poesía, me dijo que todo eso era muy bueno y la editorial me aseguró que me lo publicaba si conseguía todos los cuadros. Conseguí contactar con su familia, y ellos encantados. Son cuadros y poemas que aparecen treinta años después de estar en la mente de sus dos autores.
¿Estas acuarelas a qué etapa de Comas Quesada pertenecen?
Coinciden con el 500 aniversario de Las Palmas de Gran Canaria que es en 1978, y todas esas acuarelas están dedicadas a dicho aniversario. Reflejan la zona antigua de Vegueta, algunas reales, y otras de fotos viejas de zonas que han reconstruido y a lo mejor ya no existe como aparecen en el cuadro. Pero sí existía a finales del XIX y él conservaba una copia. De hecho algunos son lugares que ya han sido tan modificados que no se parecen en absoluto al cuadro. Pero las acuarelas están dedicadas a todas esas épocas. Por eso puedes ver alguna vestimenta antigua que no existe en el momento que lo pinta.
Sin embargo, el último cuadro no pertenece a esta serie.
Es Crepúsculo en el sur, que no era de la colección de la vieja ciudad y que Comas acababa de pintar. En este momento, él acababa de terminar ese cuadro para presentarlo a la Bienal de Acuarelas. Y me preguntó que si yo era capaz de hacer otro poema para esa obra que consideraba más importante. Y yo se lo hice. Él me dijo a continuación que lo iba a presentar a la Bienal y que, si no la ganaba, me vendía el cuadro por lo que le había costado a él: lo que era el precio del lienzo, la pintura, etc. Sin embargo, al final ganó y el cuadro está en estos momentos en el Cabildo.
Por las imágenes se puede verificar a qué época de la ciudad nos estamos refiriendo.
Muchas deben ser fotografías que él conservaba del pasado y que él convierte en acuarelas, y por eso se llama La vieja ciudad. Hay, por ejemplo, una imagen del tranvía de vapor que es de 1930 y que es cuando empieza a funcionar. En otra aparece una fuente con unas señora con faldas hasta las piernas y unas jarras que deben de ser a principio de 1900. Él está reconstruyendo esas imágenes. Yo he vivido diez años en Las Palmas y conozco bien esas zonas.
La familia del pintor y usted van a destinar los derechos de autor a la ONG Acción Alegra
Sí, porque la familia renunció a los derechos de la publicación . Entonces yo me uní a ese gesto. Acción Alegra es una ONG que tiene colegios por Centroáfrica.
Lo publica La Discreta. ¿Qué caracteriza a esta editorial?
Empezó siendo un grupo de universitarios que se reunían para hablar de literatura. Pero un buen día montaron una editorial para publicar cosas de ellos. Es una editorial sin ánimo de lucro, que publica seis o siete libros al año. Para mí ha sido una satisfacción que la editorial sacara estos poemas que estaban muertos en mi habitación, porque pienso que Pepe Comas ha sido uno de los grandes acuarelistas de España de finales de siglo. Y mis poemillas son una pequeña aportación para que no se olviden la enorme calidad de este pintor.
Se trata del tercer libro de poesía que usted publica.
Publiqué una novela que ganó el Premio de Novela Ciudad de Murcia. Luego di clases en un par de universidades y escribí dos libros de filosofía. He publicado poesía social, amorosa, etc. Pero esto, en concreto, surge de lo que me inspiraron los cuadros de Comas.
