Optimismo y prudencia. Así han acogido los profesionales médicos el anuncio del consejero de Sanidad del Gobierno de Canarias, José Manuel Baltar, de implementar medidas para frenar la fuga de facultativos formados en Canarias hacia otros países debido a la precariedad laboral y salarial. Entre dichas medidas figuran nuevas convocatorias de empleo público, además del compromiso de cubrir las jubilaciones que se producirán este año en el sector, y que rondan la centena y potenciar la carrera profesional y científica.
El presidente del Colegio de Médicos de Las Palmas, Pedro Cabrera, valoró de forma positiva dicho anuncio de ofrecer mayor estabilidad e incentivos a los profesionales de la Medicina, porque, destacó "el éxito de la sanidad se ha hecho gracias al esfuerzo de los profesionales sanitarios, no a la inversión. Es más, con un porcentaje muy bajo de inversión, los profesionales han conseguido una sanidad mejor", y recordó que la sanidad en España está muy bien posicionada respecto a otros países como Suecia, Inglaterra o Portugal, que reclaman profesionales formados en España.
Los salarios que se ofertan en esos países son hasta un 30% más altos que en España, al igual que las condiciones laborales.
Para la presidenta del Sindicato de Médicos de Las Palmas, Carmen Nuez León, el anuncio realizado por Baltar el pasado martes en el Parlamento de Canarias, "serán buenas noticias cuando se consoliden, pero hasta ahora son intenciones que son valorables, pero no dejan de ser intenciones".
La precariedad laboral y los bajos sueldos son, a juicio de Carmen Nuez, un problema importante de la sanidad española, a pesar de que el país invierte mucho dinero en la formación de sus facultativos. Las tasas de reposición del 10%, primero, y luego del 50%, a raíz de la crisis económica, han incrementado de forma considerable la carga de trabajo de los médicos en los últimos siete años, principalmente. "Mientras, a los médicos jóvenes simplemente no los contratan. Personas con la nota de corte más alta para entrar en la universidad, seis años de carrera, un año para prepararse el MIR, examinarse a una oposición a nivel nacional, y cuatro o cinco años de especialidad. Después de ese esfuerzo, que en el fondo hemos pagado todos, los dejamos marchar, se los regalamos a otros países, y eso es doloroso, hasta en Portugal, que tienen más problemas económicos que España, el médico es más reconocido y mejor pagado allí", subrayó.
Al problema de la fuga de facultativos a otros países, se le añade la precariedad laboral de los médicos jóvenes que entran en el sistema sanitario. "Muchos han estado con contratos por semana, con horarios reducidos de cuatro o cinco horas, cuando al final todos sabemos que se quedan siete. En esta comunidad tampoco hay tradición de hacer oposiciones cada dos o tres años. Aún tenemos sin terminar la OPE 2007, quedan por salir las plazas para tres categorías importantes: médico de familia, enfermería y auxiliares administrativos", subrayó.
A este respecto, el consejero de Sanidad informó que actualmente, de los 5.007 médicos que trabajan para el Servicio Canario de Salud, menos de la mitad, 2.378, son fijos (47,4%), 1.548 son interinos (30,9%), y 1.081 son trabajadores eventuales (21,5%).
Nuez apuntó que a raíz de la recesión económica, el médico ha perdido entre el 27 y el 32% de la masa salarial, algo que ha agravado la brecha salarial respecto al resto de países de la Unión Europea, a pesar de tener los médicos mejor formados. "Que el consejero considere que esto hay que arreglarlo es un paso importante, ahora hay que arreglarlo. Y esto lo haría extensible a los demás compañeros que trabajamos en Sanidad, porque pasa lo mismo con los enfermeros, auxiliares... Todos hemos ido arrimando el hombro, pero en todos hay déficit de contratación y jornadas de trabajo extenuantes", aclaró.
Por último, recordó que en el plazo de cuatro años habrá un número importante de jubilaciones en Medicina de Familia y Comunitaria, "Y ahora mismo no hay un plan rector de recursos humanos para reponer a esa primera promoción del CULP, cuando no había númerus clausus".
