La integración de las Tecnologías de la Información y de la Comunicación en las escuelas es una de las acciones innovadoras por las que más se está apostando en todas las comunidades autónomas, incluida Canarias, donde ya están trabajando en diferentes proyectos dirigidos a extender el uso de las tabletas y móviles en los procesos de enseñanza y aprendizaje. No obstante, el mal uso de la tecnología, también puede convertir a estos dispositivos en un arma de doble filo, máxime tratándose de menores con acceso a internet.
Por este motivo, la empresa tecnológica IMTCloud, con sede en el País Vasco y especializada en seguridad en la red, ha diseñado un sistema eficaz para controlar la actividad de los menores con los dispositivos electrónicos en el centro. Dicha herramienta será presentada el próximo 6 de junio a los responsables de la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias; y a la comunidad educativa en el Colegio ?San Antonio María Claret, en la capital grancanaria. Asimismo, el día 7 visitarán otros centros educativos de Tenerife.
Así lo apuntó Daniel Martínez, director ejecutivo de la empresa tecnológica IMTCloud, con diez años de vida, dedicada al desarrollo de tecnología de conectividad y especializada en seguridad, creadores de IMTLazarus, la herramienta que ya han incorporado más de una veintena de colegios del País Vasco, Madrid y Andalucía, dirigida a impulsar un uso responsable de los dispositivos móviles entre los escolares, al tiempo que se adapta al derecho legal de las familias. "Hace año y medio hubo una necesidad en una serie de colegios en el País Vasco, que demandaba una solución que se adaptara a la necesidad de poder proporcionar una herramienta para que el profesor pudiera gestionar correctamente el uso de las tabletas en la clase, al tiempo que diera una solución a las familias. Cuando empezaron a introducir los iPad en el aula se dieron cuenta que, aunque era muy positivo en la innovación del aprendizaje, había que controlar la seguridad de los mismos", indicó Martínez.
Entre las prestaciones que tiene dicho sistema cabe destacar una gestión, por parte del profesor, de la actividad en Internet de los alumnos, al instante, controlando sus horas de conexión; así como proteger y filtrar el contenido, evitando que los menores visiten páginas ajenas a la actividad educativa, no aptas para su edad.
"A través de IMTLazarus podemos establecer un bloqueo inmediato dentro del colegio o del aula. El profesor dispondrá en el aula de un panel de gestión muy fácil de manejar, a través del cual podrá permitir a los niños conectarse a Internet, decidiendo el horario de la conexión y las páginas que visitarán", informó su impulsor.
También el docente puede ver en directo la navegación que están haciendo los niños; además de recibir notificaciones sobre los comportamientos inadecuados que se pudieran hacer con el dispositivo móvil. "Incluso se pueden hacer actuaciones en el propio dispositivo, decidir que ciertas aplicaciones se muestren o no, por ejemplo puede permitir los libros virtuales, bloquear las cámaras para que los chavales no cuelguen vídeos en youtube... Ahora estamos en la fase de integración de este sistema en los programas de seguridad que utiliza cada colegio, para informar de situaciones en el uso correcto del dispositivo".
El principal problema que existe en la actualidad, según señaló el experto, es que los propios alumnos saben saltarse los actuales dispositivos o filtros de seguridad que existen en los centros para evitar que los menores puedan conectarse a youtube y a las redes sociales, por ejemplo.
Además, también se está abriendo un enorme potencial sobre su uso más allá de los centros educativos, de forma que los padres también puedan controlar la navegación en Internet de sus hijos, interrumpirla en el momento que se desee, por horarios, por tiempo indefinido, desde cualquier lugar...
"Cuando les damos a nuestros hijos un smartphone o una tableta con conexión a Internet, les estamos dando un fácil acceso a páginas no autorizadas para su edad. IMTLazarus ayuda a controlar e impedir la navegación por sitios no deseados (sexo, sectas, violencia, bullying...). Por eso, además de ser un sistema eficaz que se complementa con el elemento de seguridad del propio colegio, yo creo que donde más importancia tiene el proyecto es en dar una herramienta útil para las familias, de forma que es una solución para ambos ámbitos", subrayó.
Precisamente, son muchos los padres que demandan en los centros educativos medidas de control del uso de los dispositivos móviles. "En el fondo, todos sabemos que el uso de la tableta se extiende a la casa y al final se genera un impacto en las familias. Si el niño antes hacía los deberes en 40 minutos, ahora tarda hasta cinco horas, y lógicamente la mayor parte del tiempo están en su habitación viendo una serie o vídeos en youtube, en lugar de estudiando".
Así, hay centros que aplican las innovaciones tecnológicas en el aula, intentando buscar filtros para garantizar su buen uso; y otros que, para no tener conflictos con las familias prefieren descartar el uso de dispositivos móviles. "Hay una cosa muy importante que es el derecho legal de las familias, el centro tiene que aplicar la seguridad que considere oportuna, porque es importante para su prestigio y su calidad docente; pero dentro del hogar, al final la clave está en que los padres o tutores tengan la última palabra al respecto, que cada familia pueda configurarse la seguridad que considere oportuna de cara al niño".
Para Daniel Martínez, el problema de las aplicaciones parentales que existen en la actualidad, radican en que no están construidas desde el punto de vista de la organización, "no están bien coordinadas, y aquí es muy importante, lo primero la educación a las familias y a los profesores; y lo segundo, construir una herramienta que entienda esas dos realidades. Al final los dispositivos móviles van a ser parte de nuestras vidas, de ahí que un buen sistema de control y acompañamiento es fundamental, en la escuela y en casa".
Este proyecto surgió hace un año y medio, y ahora mismo se está aplicando en una veintena de centros del País Vasco, Madrid y Andalucía. En Cataluña también se prevé empezar a implantarse en breve. "Los colegios lo que necesitan son soluciones globales, que se adapten a las infraestructuras actuales y a las que están por venir. Nosotros en un primer momento desarrollamos este sistema para los iPad, pero al final los han demandando en otras tecnologías como Android y Windows".
Lo que diferencia a IMTLazarus de otros sistemas de seguridad y control en la navegación por Internet y uso de tecnologías móviles, según destacó Daniel Martínez, es que proporciona en los colegios un control del profesor sobre los diferentes dispositivos, desactivando el acceso a Internet sin perder la conexión wifi y consiguiendo un correcto uso de la tableta por parte de los alumnos y mayor seguridad de que sigan el ritmo de la clase correctamente.
"Estamos ante un fenómeno relativamente reciente, porque el uso de las tabletas se está incorporando de forma progresiva a los colegios como herramienta pedagógica, pero hay que tener en cuenta que se está poniendo en manos de los niños una tecnología muy potente, sin que ellos cuenten con la madurez y responsabilidad suficiente para gestionarla por si solos. Además, profesores y familia también deben tener la información adecuada".
Otra de sus ventajas es que, en el caso de que los colegios no dispongan de filtros de contenidos, esta herramienta lo lleva incorporado, con lo cual es otro problema solucionado para el propio centro.
