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Universidad

Robaina resalta la "utilidad del saber" en las figuras de Tejera y Rodríguez-Pantoja

La ULPGC celebra la investidura como Doctores Honoris Causa de los catedráticos de Arqueología de La Laguna y de Filología Latina de la Universidad de Córdoba

"En estos tiempos que corren donde parece que todo, incluso en la universidad, debe tener un valor, hoy nos atrevemos a reconocer con orgullo a dos maestros de lo intangible, dos profesores que han convertido lo inútil en útil, parafraseando al pensador Nuccio Ordine, cuyo manifiesto La Utilidad de lo Inútil pone en evidencia la necesidad de seguir persiguiendo el saber por saber, sin más objetivo práctico inmediato".

El rector de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, Rafael Robaina, puso ayer en valor la "utilidad del saber como bien intangible", en el acto de investidura como Doctores Honoris Causa del catedrático de Filología Latina de la Universidad de Córdoba, Miguel Rodríguez-Pantoja Márquez y del catedrático de Arqueología de la Universidad de La Laguna, Antonio Tejera Gaspar, por la contribución de ambos al saber y su compromiso por la sociedad canaria.

El rector destacó el compromiso con Canarias y la estrecha colaboración con la ULPGC de Tejera Gaspar y de Rodríguez-Pantoja, durante el acto de investidura en el que estuvo acompañado por el director general de Universidades del Gobierno de Canarias Ciro Gutiérrez, el presidente del Consejo Social Ángel Tristán Pimienta y la secretaria general de la ULPGC Rosa Rodríguez, así como de los padrinos de los homenajeados, la catedrática Trinidad Arcos Pereira, y el director del Departamento de Ciencias Históricas, Germán Santana Pérez.

"Hoy conocemos más que nunca antes sobre nuestro patrimonio por la labor de hombres como el doctor Antonio Tejera Gaspar; hoy, sin irnos más lejos y después de años de intensa investigación, lugares como el Parque Arqueológico de la Cueva Pintada de Gáldar o Risco Viejo y la solicitud de Patrimonio de la Humanidad para el mismo, son una realidad. Es curioso: lo intangible se ha hecho tangible, la utilidad ha aparecido, para el bien, incluso económico, de la sociedad. La misma sociedad a la que quería satisfacer el profesor Tejera".

De Miguel Rodríguez -Pantoja destacó su excelencia docente e investigadora. Como docente, ha impartido la mayoría de las asignaturas que son básicas para la Filología Latina, tanto en su vertiente lingüística, Fonética, Morfología, Sintaxis y Latín Vulgar, como en la de la literatura, la métrica, el comentario de textos y la edición crítica. Como investigador, es reconocido en latín vulgar, en literatura latina, en los estudios sobre Isidoro de Sevilla y sobre los epígrafes latinos en verso. Es uno de los grandes traductores de autores latinos: de Cicerón a José de Anchieta.

"Vivimos un tiempo complejo, si no absurdo, donde todo se mira bajo el prisma de lo útil en la acepción de su utilidad material. Se habla de estudiantes-clientes que exigen buenos resultados porque pagan; de saber productivo de mercado que se ha instalado en el sistema y opina sobre los que se debe enseñar y definen lo útil", apuntó Robaina. En este marco, el rector se refirió a Tejera y Rodríguez-Pantoja, "excelentes docentes y científicos", como ejemplo de la utilidad del saber. "Ordine nos indica que estos saberes son fines por sí mismos, tienen naturaleza gratuita y desinteresada, y son fundamentales en el cultivo del espíritu y en el desarrollo civil y cultural de la humanidad. Son útiles, señores del mercado, porque nos ayudan a hacernos mejores".

El profesor Germán Santana fue el encargado de pronunciar la laudatio de Antonio Tejera, haciendo hincapié en su empeño por reforzar la idea de identidad y de canariedad, contribuyendo a revalorizar la cultura indígena canaria y su patrimonio. "Algunos de tus alumnos, docentes en la actualidad, me han pedido que te trasladara que estarían dispuestos a acudir de nuevo a tus clases", concluyó.

Tejera agradeció el reconocimiento de la ULPGC y señaló el largo camino que aún queda para conocer las antiguas culturas de Canarias, con la colaboración entre distintas disciplinas.

Durante su intervención, Trinidad Arcos puso de relieve el reconocimiento unánime hacia el profesor Rodríguez-Pantoja, de los especialistas en Filología Clásica del país. "Todos ven en él un hombre de consenso, dispuesto siempre a prestar ayuda y a ofrecer su consejo y su mediación cada vez que se le ha requerido".

En ese asentimiento, la catedrática de la ULPGC enumeró características de su persona como el rigor y la precisión en la investigación, la pasión y el amor a la docencia, "y sobre todo los valores y la coherencia personal que los romanos definían como rasgos de un vir bonus (hombre bueno)", añadiendo que sus discípulos, entre los que ella se cuenta, "hemos tenido el privilegio de haber aprendido de él la pasión por la docencia y la investigación, el compromiso con la Universidad, el rigor en el trabajo, la curiosidad por saber y el deseo de aprender siempre, pero especialmente a ser mejores personas, a ser, sobre todo, buenos".

Rodríguez-Pantoja hizo un recorrido por los términos de la amistad, la fortuna y la gratitud, para expresar sus sentimientos en torno al reconocimiento de la ULPGC. "Afortunado", por su contribución al saber en Canarias; "Amigos", partiendo de que a través de la enseñanza "se ha ido fraguando una amistad más estrecha, una relación personal de mutua confianza y recíproca lealtad, que supera el ámbito académico, sin abandonarlo"; y "Gracias" para expresar "de corazón" lo afortunado que se siente "ante la generosidad de cuantos aquí estáis".

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