Navarra y País Vasco son las comunidades autónomas con los mejores servicios sanitarios en 2017, según el último informe de la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (Fadsp), mientras que Comunidad Valenciana y Canarias repiten un año más como las peores, en un grupo de cola en el que también están Cataluña y, por primera vez, Andalucía.

En el documento, que esta entidad publica anualmente desde hace más de 10 años, se tienen en cuenta distintos parámetros relativos a la financiación, recursos y funcionamiento de los recursos sanitarios, gasto farmacéutico, valoración de los ciudadanos, lista de espera y privatización sanitaria, entre otros.

Por segundo año consecutivo la comunidad foral obtiene la mejor puntuación de todas, 90 puntos de los 114 posibles, seguida de País Vasco (también 90), Aragón (82) y Asturias (79). Tras ellas se establece un grupo de comunidades con unos servicios "regulares" con Castilla y León (78), Castilla-La Mancha (77), Extremadura (77) y Galicia (76).

Con unos servicios "deficientes", la Fadsp sitúa a La Rioja (69), Cantabria (65), Madrid (65), Baleares (63) y Murcia (61). En el vagón de cola, la que peor puntuación recibe es Canarias (49), seguida de Comunidad Valenciana (59), Cataluña (60) y Andalucía (60).

El portavoz de la Fadsp, Marciano Sánchez Bayle, aseguró que en el último informe las diferencias entre comunidades son "más llamativas" que otros años, lo que evidencia la "gran disparidad" entre los servicios sanitarios de unas y otras. En su opinión, las autonomías en mejor situación no es porque que no hayan realizado recortes, sino porque "han sido comparativamente menores que en los demás servicios".

Entre los cambios con respecto a años anteriores han analizado la trascendencia de las últimas elecciones autonómicas de 2015, ya que desde entonces tres comunidades (Extremadura, Castilla-La Mancha y Navarra) han mejorado su posición. En cambio, otras dos (Baleares y Comunidad Valenciana) se mantienen mientras una (Cantabria) ha empeorado.

Las diferencias regionales se observan en todos los parámetros analizados y, en términos generales, las que destinan más dinero a la sanidad son "las que tienen más recursos, mejores resultados en salud y una mayor satisfacción de sus ciudadanos", según Sánchez Bayle. Prueba de ello es que Navarra y País Vasco, primeras del ranking de la Fadsp, son las que tienen un mayor presupuesto sanitario per cápita en 2016, con 1.633 y 1.632 euros por habitante, muy lejos de los 1.106 euros que destina Andalucía.

Ausencia de financiación finalista

"Hasta que no haya una financiación finalista no se acabarán estas diferencias, porque no hay garantías de que las partidas extras vayan directamente a sanidad", según Sánchez Bayle.

Asimismo, la comunidad foral también es la que tiene más médicos especialistas por habitante (2,39) y País Vasco la que tiene más enfermeros en atención especializada (4,42), parámetros en los que también está a la cola la comunidad andaluza, con 1,53 y 2,67 respectivamente. Andalucía también está a la cola en el número de camas hospitalarias por habitante (2,49 por cada mil habitantes), casi la mitad de las que tiene Cataluña (4,66).

Y en el número de quirófanos, contrastan los 11,1 por cada 100.000 habitantes que tiene Navarra con los 6,5 de Castilla-La Mancha. Una disparidad de recursos que también se traduce en las listas de espera quirúrgica, ya que mientras la demora media para una cirugía no urgente es de 182 días en Canarias, en País Vasco es de apenas 50 días.

Sánchez Bayle también ha destacado las diferencias en cuanto al porcentaje del gasto sanitario que las comunidades autónomas destinan a la contratación con centros sanitarios, donde se sitúa a la cabeza Cataluña con el 24,8 por ciento de su gasto sanitarios. Situación que contrasta con la de otras regiones como Aragón o Cantabria, donde solo destinan a la contratación de servicios privados un 4 y 3,7 por ciento respectivamente.