Gran Hermano Revolution, el reality de Telecinco, arrancó anoche -presentado por Jorge Javier Vázquez- su 18 edición con una gala que, por primera vez en la historia del programa, vivió salidas y no entradas de concursantes.

Una de las novedades de esta edición es que cien concursantes ya habían entrado en la casa de Guadalix de la Sierra (Madrid) para convivir 48 horas antes del estreno oficial del concurso, uno de los muchos cambios que fueron anunciados al público anoche.

Tras el arranque de ayer, los seguidores de Gran Hermano solo tendrán que aguardar un día más para ver mañana en Telecinco la segunda gala en directo y la conocida "casa en directo" del programa solo empezará, de verdad, después de ambas galas.

Para esta edición, el programa, que ha recibido más de 40.000 solicitudes de participación -una de las comunidades autónomas en la que se registraron más peticiones, y donde se han alcanzando las audiencias más altas, fue Canarias-, contará con un despliegue técnico de cerca de 70 cámaras (60 de ellas robotizadas), 160 sistemas de recepción de audio y un equipo humano de 250 personas.

Además de las galas semanales en Telecinco, los espectadores podrán estar al día a través de las redes sociales y aplicaciones en línea de Gran Hermano.