La multinacional tecnológica GMV realiza hasta el 16 de octubre en las minas de San José, en el Parque Nacional del Teide (Tenerife), la última fase de pruebas de robótica espacial del proyecto Lucid (Lunar Scenario Concept Validation and Demonstration), financiado por la Agencia Espacial Europea (ESA).

Desde GMV, empresa que ha integrado los equipos en el sistema y ha desarrollado el software de la plataforma robótica, detallaron este miércoles que Lucid pretende desarrollar y evaluar la combinación de herramientas y técnicas de localización y percepción del entorno necesarias para que un vehículo de exploración planetaria (rover) opere de manera eficiente y segura bajo las limitaciones ambientales del entorno lunar polar.

Durante este año, la plataforma Lucid, un prototipo de rover lunar, se sometió a una intensa campaña de pruebas en Madrid y, desde el pasado lunes, se comprueba el correcto funcionamiento de todos los sistemas en el Parque Nacional del Teide, lugar elegido por sus condiciones orográficas al presentar paisajes similares a ciertas regiones de la Luna o Marte.

Las primeras pruebas del rover se realizaron en la sede de GMV en Tres Cantos (Madrid), seguidas de las pruebas en exterior en la Dehesa de Navalvillar (Colmenar Viejo), donde se verificó la eficacia de todos los componentes del vehículo de exploración planetaria como cámaras ópticas, sistemas de estereovisión, sistemas laser para reconstrucción de modelos 3D del terreno y sistemas de navegación nocturna.

Aunque ya se trasladó hasta el Teide el pasado junio en una primera fase, el equipo de GMV recorre ahora de nuevo el parque nacional en última etapa de ensayos, que incluye pruebas definitivas de los sensores a la caída del sol y la validación de técnicas de navegación para ofrecer la información más adecuada al equipo de operación del rover.

Además, se testean y validan las capacidades de locomoción, iluminación y captura de imágenes del rover, algo fundamental en las misiones de exploración de la Luna, añadieron las mismas fuentes empresariales antes de detallar que el vehículo pesa 50 kilógramos, se mueve a 0,1 metros por segundo y se alimenta con dos baterías de litio (50Ah cada una) con autonomía de unas 3 horas.

Esta serie de pruebas son básicas porque son la mejor manera de validar la interacción hombre/máquina, es decir de evaluar si la información suministrada por todas las técnicas en condiciones reales es suficiente para el operador y si la forma en que se le ofrece es la óptima, además de indispensables para conseguir aumentar la madurez y fiabilidad del sistema al enfrentarlo a condiciones de trabajo lo más reales posibles.

"Gracias a estas pruebas hemos obtenido información muy valiosa relativa a la utilidad concreta de cada una de las técnicas empleadas y a la forma en que el operador hace uso de ellas en función del terreno que atraviesa el rover. Durante la segunda parte de la campaña estamos operando en condiciones de mayor dificultad, en trayectos más largos y con pasos más complicados", ha declarado Fernando Gandía, jefe del proyecto Lucid.

Las conclusiones aportarán avances a la carrera espacial de la ESA, que ya ensayó en Lanzarote para un proyecto similar sobre exploración de Marte. Durante los últimos años, todas las agencias espaciales, en especial la NASA y la ESA, han enviado sondas no tripuladas a orbitar alrededor de la Luna con el fin de buscar minerales y compuestos químicos de interés, misiones que han mostrado la probable existencia de agua congelada fijada al regolito lunar en cráteres que se encuentran en la zona de sombra permanente (polos) y la evidencia de materiales ricos en hidrógeno en estos puntos oscuros y fríos.

Además del proyecto Lucid, GMV lidera otros programas de robótica espacial en el marco de la Comisión Europea (H2020): desarrollo del sistema operativo para el control de robots espaciales (proyecto Esrocos); sistema de autonomía o inteligencia artificial (proyecto ERGO); coordinación de la fase de pruebas de los dos anteriores proyectos y otros más en diversos laboratorios europeos (proyecto Facilitators) o Ghocha; desarrollo de un avanzado sistema autónomo espacial de colaboración robótica.